Caja de Ingenieros es una de las escasas entidades financieras que no ha abandonado Cataluña tras el intento de golpe de Estado del 1 de octubre.
Poco a poco se van conociendo más detalles del crédito suscrito por Pablo Iglesias e Irene Montero para adquirir un impresionante chalet en la sierra norte de Madrid. El secretario general de Podemos, que aseguraba que los políticos que pagaban 600.000€ por una casa «no eran de fiar», ha cambiado de discurso en apenas unos años y vivirá en una de las zonas más exclusivas de Madrid.
La entidad bancaria no es otra que Caja de Ingenieros, una de los escasos bancos que no ha abandonado Cataluña tras el intento de golpe de Estado del 1 de octubre. Un grupo muy cercano a Òmnium Cultural (OC), pues el actual número dos de la entidad separatista, Joan Vallvé, ocupa un puesto en el Patronato de su Fundación.
Además Caja de Ingenieros fue la encargada de mantener las denominadas «cajas de solidaridad» de las entidades soberanistas destinadas a sufragar los gastos del referéndum ilegal del 9-N, y más tarde de las fianzas de los golpistas.
Vallvé fue clave para convencer a Jordi Cuixart y a la otra gran entidad soberanista, la Asamblea Nacional Catalana (ANC), acerca de las bondades de la Caja de Ingenieros para gestionar sus fondos.
El pago de la fianza para que la expresidenta del Parlamento catalán, Carme Forcadell, eludiera la entrada en prisión es una buena prueba de ello. El cheque con los 150.000 euros impuestos de fianza salieron de la Caja de Ingenieros. De hecho, la ANC la publicitó entre los independentistas como una de las entidades a la que hacer donativos.
En un mensaje desde su cuenta de Facebook, la entidad soberanista pide ayudar para afrontar los gastos y ofrece dos números de cuenta para realizar transferencias bancarias. Uno de ellos pertenece a la Caja de Ingenieros.