La estación de Trinidad Vieja, perteneciente a la línea roja (L1) del metro de Barcelona, se convirtió durante la mañana del domingo en escenario de un nuevo episodio de violencia. Dos grupos de jóvenes protagonizaron una violenta disputa que terminó con dos personas heridas. Según las primeras investigaciones, el enfrentamiento podría haberse originado por un intento de robo que derivó en agresiones físicas.
Los Mossos d’Esquadra y la Guardia Urbana de Barcelona recibieron el aviso alrededor de las ocho de la mañana, pero los presuntos atacantes ya habían huido antes de su llegada. Las víctimas, que opusieron resistencia al robo, sufrieron cortes y otras lesiones cuando los agresores usaron un objeto afilado, que aún no ha sido identificado. Fuentes policiales manejan hipótesis sobre si se trataba de una navaja, un cuchillo o incluso una botella rota. Ambas personas fueron trasladadas a un hospital tras recibir atención inicial del Sistema de Emergencias Médicas.
Este ataque se produce en un contexto de creciente inseguridad en el metro de Barcelona. Apenas un día antes, un vigilante de seguridad de la estación de Glòries, también en la línea roja, fue agredido por dos jóvenes que habían accedido sin pagar. Al pedirles que abandonaran el lugar, los agresores respondieron con una lluvia de golpes. El trabajador sufrió heridas leves, y las autoridades han identificado a uno de los sospechosos, que ahora enfrenta una investigación por un presunto delito de lesiones.