«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
«Queremos proteger a los menores del adoctrinamiento y del activismo ideológico»

VOX censura el taller sobre «consentimiento sexual» para niños en Extremadura, región gobernada por el PP: «Es vergonzoso e inadmisible»

Portavoz de VOX en Extremadura. Europa Press

El grupo parlamentario de VOX en Extremadura ha condenado la celebración de talleres patrocinados por la Junta de Extremadura, gobernada por el Partido Popular de María Guardiola, en los que se aborda «el consentimiento sexual» con niños de entre seis y ocho años. 

VOX ha registrado una propuesta en la Asamblea Extremeña para que se revise y, en su caso, se elimine cualquier actividad educativa o cultural que imponga «un adoctrinamiento ideológico o sexual inapropiado para menores».

El portavoz de VOX en el Parlamento Extremeño, Óscar Fernández Calle, ha calificado el taller impartido el pasado domingo en la Biblioteca Pública de Badajoz como «vomitivo, vergonzoso y absolutamente inadmisible», señalando que se pretende «robar la infancia y la inocencia a nuestros niños con actividades patrocinadas por la propia Junta de Extremadura».

Fernández Calle ha criticado que la Junta de Extremadura eliminó posteriormente la descripción del evento de su web, «lo que demuestra que eran plenamente conscientes del tipo de contenido que estaban promoviendo». La propuesta exige que los padres tengan conocimiento previo y otorguen su consentimiento expreso sobre cualquier contenido ideológico o afectivo-sexual que se imparta a sus hijos en el ámbito educativo o cultural. «Queremos proteger a los menores del adoctrinamiento y del activismo ideológico en las aulas y espacios públicos gestionados por el Gobierno Autonómico», ha agregado.

VOX considera que este tipo de talleres «vulnera el derecho de los padres a elegir la educación de sus hijos conforme a sus convicciones!, y constituye una grave intromisión ideológica promovida desde las instituciones. Así, exige una actuación inmediata, clara y firme por parte de la Junta de Extremadura. «Los niños son intocables, y quien los utiliza con fines ideológicos ha tocado fondo moral y políticamente», ha sentenciado.

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