Arabia Saudí, aliado de occidente, es el principal proveedor de terroristas del Estado Islámico.
Tras los atentados islamistas de Barcelona y Cambrils que se han saldado con más de 14 muertos y 120 heridos son muchos los que se preguntan si el papel de Casa Real, que mantiene relaciones económicas con los países del golfo pérsico como Qatar o Arabia Saudí, países que han financiado según distintos documentos las actividades de los grupos terroristas, como el Estado Islámico, y que buscan la islamización de Europa, ayuda a la lucha contra el terrorismo islamista.
El Rey Felipe VI acudió el pasado mes de febrero a Arabia Saudí, un viaje que fue suspendido en dos ocasiones: en febrero de 2016 por el bloqueo político de una España sin Gobierno y en noviembre tras el fallecimiento del príncipe Turki bin Abdulaziz al Saud, hermano del rey Salman.
El Gobierno, que reconoció que la situación en Arabia Saudí no era satisfactoria en materia de derechos humanos, defendió asimismo la visita. «Queremos trabajar con Arabia Saudí para mejorar. Es un viaje crucial para los intereses de empresas españolas», dijo el ministro de Asuntos Exteriores Alfonso Dastis.
Arabia Saudí, aliado de occidente, es el principal proveedor de terroristas del Estado Islámico. Tal y como señaló el pasado mes de marzo la cadena Fox News en un reportaje, citando a fuentes militares iraquíes, la mayoría de islamistas del grupo proceden de Arabia Saudí. La información reveló que los terroristas saudíes suponen el 30% de todo el contingente del ISIS en Irak.
Además, la Casa Real también mantiene buenos contactos diplomáticos con Qatar, una pequeña península con una población de 2,7 millones de habitantes, que nada en hidrocarburos -tiene la tercera mayor reserva mundial de gas- y mantiene una situación geoestratégica decisiva.
Qatar, por ejemplo, gobernado por una familia de la misma órbita wahabista que los saudíes, se ha convertido también en uno de los principales patrocinadores del Islam en nuestro continente. Los petrodólares han financiado la construcción de miles de mezquitas en todo el continente, al frente de las cuales han situado a imanes radicales para difundir su visión del Islam.
Además da soporte al Estado Islámico. El secretario de Terrorismo e Inteligencia financiera de Estados Unidos, David Cohen, ya denunció en marzo de 2015 el soporte de Qatar a miembros del Estado Islámico en Siria y denunció una legislación «demasiado permisiva» con determinadas donaciones de particulares a personas e instituciones relacionadas con el terrorismo.
Leer más…
La célula terrorista preparaba varios atentados con explosivos en Barcelona