El nominado por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, como secretario de Sanidad, Robert F. Kennedy Jr., ha cargado contra la fama de «anti-vacunas» que le han endilgado algunos medios de comunicación en los Estados Unidos, al tiempo que ha calificado el asunto del aborto en el país norteamericano como «una tragedia».
«Los medios de comunicación han afirmado que estoy en contra de las vacunas o de la industria. No soy ni lo uno ni lo otro; estoy a favor de la seguridad«, ha manifestado Kennedy Jr. durante una audiencia en el Senado previa a la votación en la Cámara Alta para ratificar su nombramiento como secretario de Sanidad.
«Cada aborto es una tragedia. No podemos ser una nación moral si tenemos 1,2 millones de abortos al año», ha dicho el político independiente durante la sesión.
En este punto, el sobrino del expresidente John F. Kennedy e hijo del ex fiscal general Robert F. Kennedy, ha recordado que en el pasado alzó para alertar de la presencia de mercurio y productos químicos en el pescado, y no por ello se convirtió en un «antipescado».
«Creo que las vacunas desempeñan un rol fundamental en la atención médica. No haré nada como secretario de Salud que dificulte o desanime a las personas a recibir cualquiera de esas vacunas», ha dicho.
Kennedy Jr. ha aseverado que en su «defensa de los Derechos Humanos» en muchas ocasiones ha «alterado el ‘status quo'» planteando «preguntas incómodas» que se salen de la opinión generalizada. «No me disculparé por ello», ha señalado, destacando los «enormes problemas de salud» de debe afrontar Estados Unidos.