Una encuesta publicada recientemente por The New York Times sitúa al expresidente Donald Trump muy por encima de las preferencias del resto de los aspirantes a quedarse con la nominación republicana, de cara a las elecciones presidenciales previstas en Estados Unidos para el año próximo.
La aparición de acusaciones federales —que en el caso de los documentos clasificados ya alcanzan las 40— en contra del exmandatario no ha hecho mella en su popularidad en los sondeos, sino que más bien parecen haberla impulsado durante los últimos meses.
Así, Trump obtiene 54% de apoyo de los encuestados en el estudio publicado por el Times, mientras que el gobernador de Florida, Ron DeSantis, alcanza un discreto 17%.
El resto de los aspirantes republicanos corre muy lejos del expresidente y del actual gobernador del estado de Florida: el exvicepresidente Mike Pence, la exembajadora ante la ONU Nikki Haley y el senador Tim Scott registran apenas 3%. El exgobernador de Nueva Jersey Chris Christie y el empresario Vivek Ramaswamy cuentan con un 2%.
El estudio, llevado a cabo entre el 23 y el 27 de julio mediante 932 entrevistas, ratifica la tendencia que hace unos días ya había adelantado la encuesta de National Research Inc, donde Trump obtuvo el 44% de respaldo de los votantes republicanos de Iowa, frente a un DeSantis que logró el 21%.
Otro sondeo publicado este mes, el de Morning Consult, también da el campanazo al gobernador de Florida, colocándolo casi 40 puntos por debajo del expresidente en una fotografía donde el primero sólo suma 17% de apoyo, mientras que el segundo totaliza 56% de la intención de voto republicana.
De este modo se va confirmando la percepción de que los esfuerzos del joven líder republicano por arrebatarle la base de votantes a Trump parecen no estar surtiendo efecto, en un contexto donde DeSantis ha tenido que mostrar una postura pública más agresiva en contra del expresidente desde que hizo oficial su aspiración de ser candidato presidencial.
La salida al ruedo de DeSantis también ha impulsado a Trump a incrementar sus habituales bromas y críticas hacia el gobernador de Florida, a quien prácticamente ha pintado como un imitador suyo a quien además aún le falta mucho camino por recorrer para intentar desbancar su liderazgo nacional.
La semana pasada el también líder del movimiento Make America Great Again aseveró que hará campaña aún si resulta condenado por alguno de los cargos que se han levantado en su contra. En un programa de radio aclaró que no hay nada dentro de la Constitución que le impida mantener su postulación en pie. En ese sentido ratificó que el proceso judicial en su contra es propio de países del «tercer mundo».
«Están usando al Departamento de Justicia y al FBI para ir por candidatos. Es una táctica bastante habitual en el tercer mundo y ahora este país la está utilizando por primera vez», dijo Trump.
El pistoletazo de salida en la primaria del Partido Republicano está previsto para el 15 de enero de 2024, donde se realizarán las primeras asambleas para designar al eventual abanderado presidencial de la formación.
