El Gobierno de Giorgia Meloni ha atribuido la disminución de llegadas de inmigrantes a las costas italianas a su labor «extraordinaria» en materia política y ha afirmado que la «emergencia» ya no está en Lampedusa sino en las islas Canarias, donde han aumentado las llegadas de cayucos en las últimas semanas.
El viceministro del Interior italiano, Nicola Molteni, ha destacado en una entrevista en ‘La Stampa’ que el país cerró agosto con 8.500 llegadas «frente a las 25.000 de hace un año», mientras que la cifra de menores no acompañados ha pasado de 18.000 a 5.000.
Además, «las repatriaciones aumentaron un 20%», según el viceministro, que ha alegado que todas las medidas adoptadas se hacen respetando los derechos humanos.
Para Molteni, se trata «de un resultado extraordinario» del Gobierno de Giorgia Meloni, que ha potenciado acuerdos de cooperación con países de la ribera sur del Mediterráneo, como Túnez, Libia y Egipto. «Mientas que el año pasado la emergencia estaba en Lampedusa, ahora está en Canarias, en España», ha apostillado.