El excomisario europeo y principal arquitecto del Pacto Verde de la Unión Europea (UE), Frans Timmermans, ha insistido en la colaboración del Partido Popular Europeo en la estrategia climática que ha lastrado la economía del continente.
«El Pacto Verde no sólo ha sido posible porque el Partido Popular Europeo haya participado en todas las decisiones y votado a favor… el PPE lo ha reivindicado a menudo como su proyecto«, ha declarado el socialista holandés.
Desde el inicio el Partido Popular Europeo respaldó esta iniciativa ideológica que ha provocado una alarmante desaceleración económica, el debilitamiento de la industria europea y un encarecimiento de la energía. Ahora, con el descontento generalizado de los ciudadanos, el PPE intenta eludir su responsabilidad y ha culpado a Timmermans.
Ante el fracaso del Pacto Verde, Bruselas ha comenzado a sustituir su retórica ecologista por el concepto de «transición limpia». Sin embargo, Timmermans ha salido en su defensa y ha advertido que el cambio de terminología no alterará el fondo de la agenda climática globalista. «El Pacto Verde es la mejor manera de conseguirlo», ha asegurado el holandés. A pesar de ello, ha admitido que aceptaría modificar el nombre, siempre que su esencia se mantenga intacta.
Las declaraciones de Timmermans confirman lo que Patriotas por Europa (Pfe) y el Grupo de los Conservadores y Reformistas Europeos (ECR) han denunciado durante años: «El Partido Popular Europeo ha sido corresponsable del desastre del Pacto Verde» y ha actuado —recuerda Patriotas— «como aliado clave de la izquierda en la imposición de políticas globalistas que han empobrecido a los ciudadanos y debilitado la industria europea».
