El ministro del Interior de Francia, Bruno Retailleau, ha adelantado que París dará «una respuesta gradual» a la «negativa de Argelia de aplicar el Derecho Internacional». En un breve mensaje publicado en la red social X, Retailleau ha manifestado la decisión del comité interministerial, bajo presidencia del primer ministro François Bayrou, de revocar el acuerdo de 2007 para la exención de visado de los argelinos con pasaporte diplomático.
Las palabras de Retailleau han llegado después de que el Ministerio de Exteriores argelino expresara su «rechazo categórico» a las «amenazas e intentos de intimidación» por parte de Francia, así como a «los requerimientos, los ultimátums y cualquier lenguaje amenazador». En este sentido, han afirmado que «desaprobamos el enfoque selectivo de Francia respecto de los acuerdos bilaterales e internacionales que vinculan a los dos países».
Argelia rechazó así la lista entregada a las autoridades que contiene los nombres de 60 argelinos que están sujetos a órdenes de expulsión, «tanto en la forma como en el fondo». Además, han sostenido que «el protocolo de 1994 no puede disociarse de la convención sobre relaciones consulares de 1974, que sigue siendo el principal marco de referencia en materia consular entre los dos países».
Las tensiones entre Francia y Argelia se han intensificado en los últimos tiempos debido a la detención del escrito franco-argelino Boualem Sansal, reconocido por sus críticas al gobierno de Argelia y también por la negativa a colaborar con la deportación de ciudadanos argelinos en Francia, un asunto que ha cobrado notoriedad después de que un argelino cuya deportación rechazó Argel apuñalara a varias personas, una de las cuales terminó falleciendo.