Hungría cuenta con una de las tasas más bajas de toda la Unión Europea de personas fuera de la fuerza laboral (13,6%), según el barómetro de Eurostat del primer trimestre de 2023. En el conjunto de la UE la tasa se sitúa en el 18,2%.
Rumanía e Italia registraron la mayor proporción de personas fuera de la fuerza laboral, con un 25,8 % y un 25,6 %, respectivamente, seguidos de Grecia (22,8%), Croacia (21,8%) y Bélgica (19,6%).
El país gobernado por el partido Fidesz destaca por lograr mantener una tasa de desempleo del 3,8% en junio, según datos publicados por la Oficina Central de Estadística, a pesar de enfrentar una situación económica desafiante por la guerra de Ucrania y las sanciones ejecutadas desde Bruselas.
El Gobierno húngaro sigue sin ceder ante las adversidades y centrado en el objetivo del pleno empleo y construir una sociedad fundamentada en el trabajo y la meritocracia, en contraposición la «sociedad del bienestar».
Según Eurostat, en comparación con mayo el desempleo disminuyó en junio en 2.000 personas en la UE y en 62.000 personas en la zona euro. Respecto a junio de 2022, el desempleo descendió en 387.000 personas en la UE y en 441.000 personas en la zona euro. Y en un contexto de crecimiento económico y reducción de impuestos.
El año pasado, la OCDE clasificó a Hungría entre los diez países con los entornos fiscales más competitivos, colocándole por delante de países como Suecia, Alemania y Austria. Ahora, el ministro de Finanzas, Mihály Varga, ha manifestado que, a pesar de la guerra, el Gobierno de planea introducir más recortes de impuestos y de burocracia para las pymes.