Hay pocas «tribus» en Occidente más «woke», más progresistas y más reverenciadas por las terminales mediáticas del régimen que los ecologistas radicales y los partidarios de las fronteras abiertas de par en par a la inmigración del Tercer Mundo. Por eso, dice mucho del caos social que está trayendo la llegada masiva de poblaciones distintas y distantes en Europa que los Verdes en Alemania hayan dicho «basta».
Según informa el diario financiero alemán Handelsblat, un grupo de políticos «verdes» -partido que forma parte de la actual coalición de gobierno- exige un cambio radical en lo que califican de «política migratoria fallida» en el país. Y ayuntamientos de toda Alemania se han apresurado a darles la razón.
El director ejecutivo de la Asociación de Ciudades y Municipios, Gerd Landsberg, ha acogido con satisfacción el llamamiento de este grupo de políticos verdes a aplicar una política de asilo más dura. «Necesitamos un cambio en la política migratoria, también para garantizar la aceptación social», dijo Landsberg a Handelsblatt. «Esto incluye una integración más efectiva, una comunicación más clara, también hacia las personas que llegan, y la participación activa de los solicitantes de asilo».
Ya antes, un grupo dentro del Partido Verde, que se llaman a sí mismos «los verdes realistas», o ‘Vert Realos’, había pedido un cambio de rumbo en la política de refugiados al ver desbordados los servicios sociales de un ayuntamiento tras otro. En un documento titulado «Memorándum para una política migratoria diferente en Alemania», el grupo advierte sobre un giro a la derecha «en caso de que los ciudadanos sigan perdiendo su sensación de seguridad y los inmigrantes no sean percibidos como algo normal en el vecindario». Europa, dicen los firmantes (entre los que se cuentan Rebecca Harms, expresidenta de los Verdes y la Alianza Libre Europea en el Parlamento Europeo, y el alcalde de Tubinga, Boris Palmer), no puede pretender que Alemania se quede sola acogiendo a todos los refugiados que llegan a continente.
Landsberg, de la conservadora CDU, subrayó que claro que hay que ayudar a quienes sufren persecución o escapan de escenarios bélicos como Ucrania, pero el esfuerzo se tiene que repartir equitativamente en Europa. «No puede ser que Alemania lleve la carga principal y los otros estados de la Unión Europea acojan a muchas menos personas«, dijo el jefe de la asociación de ciudades. El principio debe ser ayudar, distribuir de manera justa, pero también proteger las fronteras exteriores de manera efectiva. «Esto también es indispensable para la aceptación entre nuestra población».
