Di Maio ha reconocido a los medios que mañana se reunirá con Salvini y comenzarán las conversaciones para encontrar puntos en común sobre los programas electorales.
El líder del Movimiento Cinco Estrellas (M5S), Luigi Di Maio, y el de la Liga Norte, Matteo Salvini, celebraron la decisión de Silvio Berlusconi, cuyo partido Forza Italia es socio coaligado de la Liga, de permitir a ambas fuerzas negociar un posible Gobierno en Italia.
Forza Italia emitió un comunicado en el que afirmó que no impondrá vetos «si otra fuerza política en la coalición de centroderecha asume la responsabilidad de formar un gobierno con el M5S».
También señaló que este paso a un lado por parte de Forza Italia no rompe la alianza conservadora, formada por la Liga, Forza Italia y Hermanos de Italia, pero matizó que no apoyará en el Parlamento un Gobierno entre la Liga y el M5S, dado que el Cinco Estrellas ha insistido en las últimas semanas en que negociaría un Ejecutivo con la Liga, pero no con Forza Italia.
Di Maio ha reconocido a los medios que mañana se reunirá con Salvini y comenzarán las conversaciones para encontrar puntos en común sobre los programas electorales.
«Lo importante es el contrato de Gobierno, se necesitan soluciones que los italianos esperan desde hace treinta años», dijo.
De hecho, Di Maio ha cancelado para mañana los compromisos que tenía previstos en su agenda para dialogar con la Liga lo que el M5S ha denominado un «contrato de Gobierno».
«Me alegro de que haya prevalecido la responsabilidad. Es un momento importante», ha subrayado.
También Salvini se ha referido a esta decisión y ha aplaudido «la lealtad y la coherencia» de Berlusconi al mantener la unidad de la alianza de derechas.
Salvini urgió, además, al M5S a acelerar los tiempos de las negociaciones para impulsar un mandato en el país y dijo que la prioridad es trabajar sobre el programa y los miembros del Gobierno.
Además de intentar compatibilizar los programas electorales, ambas fuerzas deberán acordar el nombre de la figura que ejercerá como primer ministro, dado que tanto Di Maio como Salvini se presentaron como candidatos a este cargo en las elecciones generales del 4 de marzo.
No obstante, los dos han abierto en los últimos días la posibilidad de elegir a una tercera persona si llegaran a un entendimiento.