«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
La Gaceta de la Iberosfera
Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
«la inmigración es una cuestión de civilización»

Orbán insiste en que Hungría quiere seguir siendo húngara: «No queremos una sociedad mixta»

El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán. Twitter

Con independencia de lo que uno piense del primer ministro húngaro, Viktor Orbán, hay que admirar la constancia y sencillez de su mensaje: Hungría quiere seguir siendo húngara, y rechaza convertirse en una «sociedad mixta». Así volvió a decirlo este miércoles en la Conferencia Nacional de Conservadurismo (NatCon) en Bruselas.

«Hungría no quiere una sociedad mixta, quiere proteger sus fronteras, quiere preservar su cultura y sus tradiciones», afirmó el primer ministro húngaro, subrayando que corresponde a cada Estado miembro decidir de forma independiente cómo quiere resolver el problema de la inmigración.

No es necesaria una política migratoria común de la Unión Europea, la cuestión de la inmigración debe seguir siendo competencia nacional, afirmó el primer ministro, añadiendo que, en su opinión, la inmigración es una cuestión de civilización.

Durante el panel, que se celebró con el filósofo israelí-estadounidense Yoram Hazony, que dirige el Instituto Herzl en Jerusalén, Orbán destacó que aquellos cuyas solicitudes de asilo están pendientes deben esperar fuera de las fronteras. El líder de Hungría afirmó que la ilegitimidad de cruzar la frontera ilegalmente es fácil de entender, ya que es un acto ilegal y el cruce ilegal de la frontera no es un derecho humano, sino un delito.

«En Hungría, la frontera es la frontera, y cualquiera que no tenga derecho a entrar al país no cruza la frontera«, afirmó Orbán. ·Este es el tema más importante, esta es la línea roja. Si esto no se logra en toda Europa, la inmigración no se resolverá».

Europa es un continente con raíces cristianas, pero la mayoría de quienes ahora quieren venir a Europa provienen de otras culturas, principalmente de origen musulmán. Además, la inmigración tiene un horizonte histórico que se extiende indefinidamente, por lo que cabe preguntarse cómo será Hungría en el futuro, si será cristiana, musulmana o de otro origen cultural.

Orbán dijo que cada uno debe decidir por sí mismo qué tipo de entorno y cultura quiere crear, pero nadie debe imponer su voluntad a los demás. Hungría cree que la «sociedad mixta» esbozada por los liberales no es un buen camino a seguir.

Según el primer ministro, no podemos determinar cómo cada país resuelve el problema del envejecimiento de la sociedad desde una posición centralizada en Bruselas. Según Hungría, forzar la inmigración no es la respuesta al envejecimiento. Hungría quiere, entre otras cosas, mejorar la situación mediante un fuerte sistema de apoyo a las familias, afirmó.

Hizo hincapié en que los gobiernos conservadores, incluido Hungría, que según los dirigentes de Bruselas «no se están comportando adecuadamente», están siendo chantajeados, y la Comisión Europea se ha convertido en un actor político en lugar de un guardián de los tratados de la UE. La verdadera razón del impulso de los líderes de la UE a favor de la inmigración, dijo, es que los liberales quieren reunir nuevos votantes y transformar la sociedad según su propia visión.

+ en
.
Fondo newsletter