La ministra había asegurado ante el TC que se sintió aludida con la convocatoria de la manifestación y defendió el derecho del Gobierno a responder cuando es agredido.
El Tribunal Constitucional (TC) falló a favor de Alternativa para Alemania (AfD), que había demandado a la ministra de Educación, Johanna Wanka, al considerar que, al criticar a la formación, había violado su obligación de guardar neutralidad desde su puesto en el Gobierno.
El origen de la demanda es un comunicado de prensa emitido por el Ministerio en noviembre de 2015, ante una manifestación convocada por AfD contra la acogida masiva de refugiados, en el que Wanka acusaba al partido de «apoyar la radicalización de la sociedad» y prestar «un respaldo insoportable» a «ultraderechistas que practican la incitación al odio».
Según el TC, la «evaluación negativa de un acto político de un partido por parte de órganos estatales» que pueda causar un «efecto disuasorio e influir el comportamiento de potenciales participantes» en el mismo «vulnera el derecho del partido afectado a la igualdad de oportunidades» recogido en la Constitución.
Este principio de igualdad de oportunidades exige el respeto del precepto de «neutralidad» por parte de los órganos del Estado y se extiende más allá del periodo de campaña electoral, subraya el Tribunal, con sede en Karlsruhe.
En este sentido, recuerda que «el proceso de formación de la voluntad política no se limita a la campaña electoral, sino que tiene lugar de manera continua».
A su juicio, el Gobierno tiene derecho a explicar las medidas que aprueba y, en este contexto, a responder de manera objetiva a posibles objeciones críticas a las mismas, pero ello no incluye el «derecho a contragolpe», es decir, a responder en el mismo tono a ataques «subjetivos o difamatorios».
La ministra había asegurado ante el TC que se sintió aludida con la convocatoria de la manifestación y defendió el derecho del Gobierno a responder cuando es agredido, mientras que AfD la acusó de abusar de su puesto al utilizar la infraestructura del Ministerio para atacar la libertad de expresión de un partido político.
El copresidente de AfD Alexander Gauland se mostró satisfecho con la sentencia del TC: «gracias a Dios, todavía hay jueces en Karslruhe», manifestó en un comunicado.
«Es inaceptable cómo la señora Wanka ha hecho mal uso de su cargo para atacarnos. La sentencia debería servir de lección a otros miembros del Gobierno», añadió el otro copresidente del partido, Jörg Meuthen.
Para AfD, «la sentencia es un mensaje claro al Gobierno en cuanto a que no utilice sus estructuras ministeriales, pagadas por los contribuyentes, para la agitación política contra la oposición».