La violencia extremista vuelve a golpear en Alemania. Un total de 36 furgonetas de Amazon y Telekom fueron destruidas por el fuego en la noche del martes 17 de junio en Berlín, en lo que las autoridades califican como una operación de estilo militar.
El grupo radical Acción Antimilitarista se ha atribuido la autoría de los ataques incendiarios. En la calle Mohriner Allee, en el barrio berlinés de Britz, 19 vehículos de Amazon fueron completamente calcinados, mientras que otros cuatro resultaron dañados. En paralelo, en la calle Buchberger Straße, otras 17 furgonetas fueron incendiadas en distintos puntos de las instalaciones.
Los servicios de seguridad investigan los hechos como un presunto incendio provocado mientras las autoridades consideran que estos ataques forman parte de un patrón creciente de sabotajes extremistas contra infraestructuras empresariales.
No es el primer episodio reciente de este tipo en la región. La semana pasada, en Schönwalde-Glien (Havelland, Brandeburgo), decenas de furgonetas de Amazon y Deutsche Post quedaron igualmente reducidas a cenizas tras un ataque similar. A ello se suma el incendio criminal provocado el pasado miércoles 11 de junio por el grupo Anarchist Bunch MRMD en una empresa de microchips de Berlín.
AfD acusa al Gobierno alemán de amparar la violencia
La formación soberanista Alternativa para Alemania (AfD) ha sido una de las pocas voces políticas en denunciar con firmeza estos actos y el silencio institucional. «¿Y el Gobierno federal, liderado por la CDU? Silencio. Ni una palabra de horror, ni una protesta de indignación, ni una palabra del Ministerio del Interior», ha denunciado el partido en sus redes sociales.
+++ Linksextremismus: Auch die CDU ignoriert den linken Terrorismus! +++
— AfD (@AfD) June 18, 2025
36 ausgebrannte Fahrzeuge – in der Nacht zum Dienstag wurden in Berlin fast zeitgleich Transporter von Amazon und der Telekom in Brand gesetzt. Ein linksextremes Bekennerschreiben spricht offen von… pic.twitter.com/XE6M5U0bXc
Desde AfD critican el doble rasero institucional: «Mientras la Oficina Federal para la Protección de la Constitución lleva años intentando inventar una ‘amenaza a la democracia’ de la derecha, los delincuentes de izquierdas pueden agravar la situación sin oposición».
Y acusan al Ejecutivo alemán de amparar la violencia de extrema izquierda mientras persigue a los ciudadanos por expresar opiniones críticas. «Este doble rasero destruye la confianza en el Estado de derecho. Quienes apoyan a ONG ecologistas de izquierda con millones de dólares para combatir opiniones impopulares, pero trivializan o incluso premian la violencia de izquierda, no se oponen al extremismo; se convierten en cómplices», advierte la formación.