La batalla por el lenguaje woke en el Reino Unido ha dejado en las últimas horas una escena viral. Martine Croxall, presentadora veterana de la BBC, desafió en directo la imposición ideológica del lenguaje inclusivo al corregir la redacción del teleprompter. Mientras leía un reportaje sobre los riesgos del calor extremo, en lugar de repetir la fórmula «personas embarazadas», Croxall la interrumpió para decir con énfasis: «Mujeres».
El gesto, breve pero cargado de simbolismo, ha provocado una oleada de apoyo en redes sociales. La escritora J.K. Rowling, una de las voces más firmes contra la imposición transgenerista, lo ha celebrado: «Tengo una nueva presentadora favorita de la BBC», escribió. También la extenista Martina Navratilova ha elogiado la valentía de Croxall. Para muchos usuarios, el gesto es un signo de resistencia frente a la deriva ideológica que pretende borrar la realidad biológica de las mujeres.
Croxall, que acumula más de tres décadas en la cadena pública británica, ha agradecido el respaldo masivo desde sus redes sociales: «Un enorme agradecimiento a todos los que han decidido seguirme hoy… Ha sido un día intenso», publicó. En medios británicos, la presentadora ha reconocido que está dispuesta a afrontar cualquier consecuencia por atreverse a desafiar el discurso dominante en la BBC.
De momento, la dirección de la cadena ha optado por respaldarla. Según fuentes internas, los responsables de la BBC se han mostrado «relajados y apoyándola», en un cambio de tono llamativo para una corporación que lleva años plegándose a los dictados de la ideología de género.
El episodio reabre el debate sobre el uso forzado de expresiones como «personas embarazadas», impulsadas por el lobby trans para desdibujar el sexo biológico bajo el pretexto de la «inclusividad». Frente a quienes exigen visibilizar a supuestas minorías no binarias, crece el rechazo de quienes denuncian una negación de lo evidente: sólo las mujeres pueden quedarse embarazadas.