Pocos opositores han reaccionado a la propuesta de Humberto Ortega, exjefe del EjĆ©rcito y hermano del dictador sandinista Daniel Ortega, que sugiere que la nueva coyuntura para resolver la crisis sociopolĆtica en Nicaragua, debe estar dirigida a las elecciones presidenciales de 2026.
A mĆ”s de una semana de la propuesta del militar en retiro, ningĆŗn grupo polĆtico ha emitido una declaración oficial respecto al tema. Pocos lo han hecho en carĆ”cter individual, mientras otros mantienen silencio. Esa reacción podrĆa indicar que hay temor de condenar o que tiene la aceptación entre grupos de la oposición que controla el sandinismo disidente que gobernó con Ortega durante la primera dictadura del izquierdista partido Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), que se atribuye la representación de la oposición en la capital estadounidense, el paĆs al que en el pasado le llamaban āenemigo de la humanidadā.
A juicio del exjefe del EjĆ©rcito, que ha propuesto la ācohabitaciónā con el rĆ©gimen de su hermano, la excarcelación y el destierro de 222 opositores polĆticos, ha generado, segĆŗn su juicio, una ānueva coyunturaā que cierra la creada durante las protestas de abril de 2018, que dejó un saldo de mĆ”s de 350 muertos, ejecutados con armas de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas y de la PolicĆa Nacional, de acuerdo con informes de organismos de derechos humanos internacionales.
«Esta coyuntura tiene su meta en las elecciones del 2026», acotó Humberto Ortega, en declaraciones al periodista Andrés Oppenheimer, porque en su opinión ni la oposición ni la actual dictadura de su hermano, estÔn preparados para ir a comicios.
El sandinismo disidente quiere ir a elecciones. AsĆ lo hizo saber a la Voz de AmĆ©rica, HĆ©ctor Mairena, encargado de relaciones internacionales de Unamos, antiguo Movimiento Renovador Sandinista (MRS) āfundado por altos cargos de la primera dictadura sandinista ā, que dijo que las āelecciones tendrĆan que ser lo mĆ”s pronto posibleā, pero aƱadió que antes los presos polĆticos que quedan en las mazmorras deben ser liberados, restauración de las libertades democrĆ”ticas y el retorno de los exiliados. Sin embargo, no habló de justicia y sus declaraciones confirman que estarĆan apostando por la propuesta de Humberto Ortega, solo que un poco antes de lo que āsugirióā.
MƔs impunidad
La propuesta del hermano del dictador sandinista es una estocada para las familias de las vĆctimas de abril de 2018, que demandan justicia por la represión y los crĆmenes. Y es que las declaraciones de Humberto Ortega, sugieren mĆ”s impunidad para el sandinismo, un negro episodio que Nicaragua vive desde el primer rĆ©gimen sandinista (1979-1990), con miles de muertes, desaparecidos, fusilamientos, ejecuciones extrajudiciales, torturas a los presos polĆticos, y confiscaciones de propiedades; delitos que hoy por hoy permanecen en la impunidad.
Luego, tras perder las elecciones y desde la oposición (1990-2007), el sandinismo siguió su cultura de violencia, crĆmenes, asonadas y destrucción hasta que el dictador Ortega retornó al poder en enero de 2007, esta vez sin el apoyo de un grupo de altos cargos que gobernaron con Ć©l en la dĆ©cada de los 80, y que hoy viajan o permanecen en Washington atribuyĆ©ndose la representación de la oposición, entre ellos, personajes seƱalados de crĆmenes como Dora MarĆa TĆ©llez, a quien Ortega excarceló recientemente junto a 221 opositores; y Luis Carrión, uno de los ānueve comandantes de la ārevoluciónā, miembro de la dirección nacional del FSLN, exviceministro del Interior, y seƱalado de responsabilidad de los crĆmenes cometidos contra opositores durante dirigió ese ministerio junto a TomĆ”s Borge, otro de los nueve cabecillas del sandinismo.
NingĆŗn alto cargo del sandinismo seƱalado de responsabilidad de crĆmenes y robos en la dĆ©cada de 1980 ha sido enjuiciado, debido a que antes de entregar el poder se protegieron con la aprobación de una ley de AmnistĆa en la que se perdonaban los delitos cometidos en esos aƱos y los que cometerĆan en el periodo de transición de mando. La Ley fue derogada por el nuevo gobierno de Violeta Barrios de Chamorro, que luego aprobó una amnistĆa mĆ”s āgenerosaā.
Acostumbrados a las negociaciones que han beneficiado al sandinismo, la propuesta del exjefe del EjĆ©rcito establece que la crisis sociopolĆtica que atraviesa Nicaragua solo podrĆa resolverse, segĆŗn su juicio, en una ānegociaciónā que calificó de ācomplicada, dura, y presiones de un lado y de otroā, al tiempo que advirtió que de no crearse una āruta de verdadā, el paĆs podrĆa encaminarse āa un total desastre de anarquĆaā.
Negociación que podrĆa concluir con el āperdónā y āolvidoā de crĆmenes como los ocurridos desde 1979. La Ćŗltima amnistĆa aprobada por el sandinismo fue la del 8 de junio de 2019, tras sofocar las protestas de 2018 a sangre y fuego.
La crisis se agrava
Consultado sobre el tema, el acadĆ©mico y exembajador de Nicaragua en Alemania y Suecia, JosĆ© DĆ”vila, dijo que hasta hoy no ha leĆdo un anĆ”lisis āobjetivo e integralā del exjefe militar, y considera que las Ćŗltimas declaraciones han agravado la situación polĆtica de la nación centroamericana.
āEn mi opinión, agravan mĆ”s la situación polĆtica porque en frases sustanciales dijo: dejemos que sigan las cosas como estĆ”n. Esperemos. No hay mucho que hacer por ahora. Mi hermano tiene que abrir un poco los ojos sobre algunas situaciones. Estamos trabados. La oposición no es alternativa. En el Gobierno hay sus situaciones. Y propone cosas que no han funcionado en el pasado, como un diĆ”logo que (cuyos acuerdos) no cumplen, o unas elecciones para que se las sigan robando. No aportó nada a una posible solución a la crisis del paĆs. MĆ”s bien trató de confundir para que todo siga en esencia, igualā, acotó.
Daniel Ortega tiene el control total de las instituciones del Estado, el Consejo Supremo Electoral (CSE) en poder de militantes del partido FSLN, que le garantiza los fraudes electorales. En las Ćŗltimas elecciones, las municipales de noviembre de 2022, le adjudicó el 100% de las alcaldĆas al partido de la dictadura.
La agrupación polĆtica Ciudadanos por la Libertad, que se define como centroderecha, se pronunció a favor de ārestaurar la democracia mediante elecciones libres, sin pactar, ni colaborar, y por eso hemos pagado el precio en persecución, despojos partidarios y represiónā, sin referirse directamente a las declaraciones del general en retiro.
El mismo āguionā
Luis Fley, exjefe āContraā, el grupo rebelde que combatió al primer rĆ©gimen sandinista, y directivo de las Fuerza DemocrĆ”tica Nicaragüense (FDN), cree que algunos de los grupos de la oposición estĆ”n aceptando como vĆ”lidas las declaraciones de Humberto Ortega, al no pronunciarse oficialmente.
Grupos de opositores se inclinan por una salida electoral y se han aglutinado en el llamado grupo āMonte Verdeā, nombrado asĆ por haberse integrado en un importante centro ecoturĆstico en Costa Rica. El guión a seguir es organizarse y crear las condiciones para ir a elecciones con Daniel Ortega.
Fley dijo que detrĆ”s de Monte Verde estarĆa Manuel Orozco, de DiĆ”logo Interamericano, un organismo con sede en Washington que se define como un centro de anĆ”lisis e intercambio polĆtico internacional. Dos de los integrantes del gran capital en Nicaragua, Carlos Pellas y Ramiro Ortiz, forman parte del consejo de liderazgo del presidente de DiĆ”logo Interamericano, de acuerdo con la pĆ”gina web del organismo.
āEs la persona que ha estado empujando el diĆ”logo para que haya elecciones limpias y libres, pero con Daniel Ortega en el poder nunca van a ser libres. Esa es la misma lĆnea que propone Humberto Ortegaā, asegura Fley, ex precandidato presidencial actualmente en el exilio, que ha expresado que Daniel Ortega no saldrĆ” por la vĆa cĆvica, que a su juicio es lo que ha oxigenado a Ortega, como sucedió en los Ćŗltimos dos diĆ”logos durante la crisis de abril de 2018.
En sus declaraciones Fley asegura fue excluido de Monte Verde. La llamada Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB), integrada por ONG de izquierda y Unamos, āse opusieron a que me invitaran porque āsoy un hombre de derechaā y porque hablo de la vĆa violentaā como solución a la crisis en Nicaragua.
āYo digo lo que creo pudiera sucederā, dijo Fley. Con base en su experiencia y las acciones del sandinismo asegura que Ortega no se irĆ” por las buenas y que el dictador ha demostrado que no estĆ” dispuesto a entregar el poder.
āLa verdad no deseo entrar a Monte verde, no quiero ser utilizado por los izquierdistas que estĆ”n ahĆā, acotó, aunque en el grupo hay algunos opositores que se identifican como de derecha, aliados con el sandinismo disidente que controlarĆa al grupo.
Una nueva etapa de lucha
Fley asegura que la propuesta es para elecciones en 2026, no hay por ahora ninguna fuerza que obligue a Ortega a elecciones anticipadas, las sanciones no han tenido ningĆŗn efecto, asĆ es que la apuesta es la vĆa del diĆ”logo y elecciones en 2026.
El sandinismo no orteguista, pese a que no goza de aceptación mayoritaria, apuesta por la presión internacional de Estados Unidos y la Unión Europea para obligar a la dictadura realizar elecciones en Nicaragua y asà ellos tomar el poder. Su objetivo es la continuidad de un sandinismo sin Ortega y su mujer Rosario Murillo.
Para el acadĆ©mico DĆ”vila, la oposición se estĆ” replanteando lo que define una ānueva etapa de lucha. Hay muchas reflexiones y comunicacionesā.
A pesar de las coincidencias sobre ir a elecciones con Daniel Ortega, propuesta por Humberto Ortega, el exembajador DĆ”vila no cree que el exjefe del EjĆ©rcito, estĆ© coordinando con el sector sandinista disidente para ser alternativa. āLos nicaragüenses quieren una democracia, en libertad, pluralismo y con justicia. Democracia no con sectarismos ni imposicionesā, subrayó.
Mientras, Ciudadanos por la Libertad -que integra Monte Verde- escribió en Twitter, que āNicaragua necesita definir su rumbo, dejando atrĆ”s los fallidos experimentos socialistas, la corrupción y las propuestas populistas, que tanta pobreza y dolor nos han causadoā.