El Gobierno colombiano, liderado por Gustavo Petro, ha reiterado este lunes que reconoce la «legitimidad» del terrorista Ejécito de Liberación Nacional (ELN) como interlocutor en el marco del «proceso de paz« después de que la organización insurgente afirmara que la mesa de diálogo está «en crisis».
«Las declaraciones de los últimos días son un llamamiento a ambas partes a ser responsables con las dinámicas del conflicto armado y con lo que está sucediendo en la vida diaria de los territorios», ha informado además la Presidencia colombiana en un comunicado.
En este sentido, ha recalcado que el compromiso del Gobierno con la paz «es inaplazable». «Esperamos que la respuesta del Ejército de Liberación Nacional (ELN) sea consecuente con esta invitación y este llamamiento», ha agregado.
Esto se produce después de que el ELN reaccionara a unas declaraciones anteriores de Petro, quien en una cita con militares de las Fuerzas Armadas colombianas cuestionó el liderazgo de mando de los jefes de la guerrilla. «Ellos se sientan en la mesa y hablan, pero, ¿mandan?», se cuestionó el mandatario colombiano.
«Los diálogos de paz no pueden estar sometidos a los vaivenes en las declaraciones públicas del presidente que, al final, desconoce a la delegación del Gobierno, a los países garantes, a los acompañantes permanentes (la Iglesia y la ONU) y a los países acompañantes», respondió la guerrilla en un comunicado, según ha recogido el diario ‘El Tiempo’.
