El Gobierno de China ha presentado este viernes su plan de paz para Ucrania compuesto por doce propuestas en un esfuerzo por dar una solución política a la invasión rusa de Ucrania, en el que pide un cese al fuego de ambas partes y defiende la integridad territorial de todos los países.
El día en el que se cumple el primer aniversario de la guerra en Ucrania, el Ministerio de Exteriores chino ha enumerado doce propuestas para poner fin al conflicto armado, entre las que se incluye una petición a Occidente para que finalice sus sanciones a Rusia, o el establecimiento de conversaciones de paz.
Según China, es importante respetar la soberanía de todos los países en el marco de los principios de la Carta de Naciones Unidas –como defiende Ucrania–, así como garantizar de manera efectiva la soberanía, la fuerza o riqueza de los Estados.
«Todas las partes deben defender conjuntamente las normas básicas que rigen las relaciones internacionales y salvaguardar la equidad y la justicia internacionales», se lee en la propuesta, donde se resalta la relevancia de que no se adopten «dobles raseros».
Asimismo, el Gobierno chino ha pedido que se abandone «la mentalidad de Guerra Fría», afirmando que la seguridad de un país «no puede ser a expensas de la seguridad de otros países», mientras que ha señalado que la seguridad regional «no puede garantizarse mediante el fortalecimiento o incluso la expansión de bloques militares».
Por ello, ha pedido a las partes a adherirse a un concepto de seguridad «común, integral, cooperativo y sostenible» centrado en la estabilidad a largo plazo. También ha hecho énfasis en promover «una arquitectura de seguridad equilibrada» en el continente euroasiático.
Por otra parte, China ha pedido a Occidente que detenga las sanciones unilaterales contra Rusia, sosteniendo que estas «no solo no resolverán los problemas, sino que crearán otros nuevos«.
«Los países relevantes deben dejar de abusar de las sanciones unilaterales y la ‘jurisdicción de brazo largo’ contra otros países, desempeñar un papel en el enfriamiento de la crisis en Ucrania y crear las condiciones para que los países en desarrollo desarrollen sus economías y mejoren la vida de las personas», ha pedido el gigante asiático, instando a Occidente a oponerse a cualquier sanción no autorizada por el Consejo de Seguridad de la ONU.
Pekín ha resaltado que «no hay ganadores en las guerras», por lo que ha hecho un llamamiento a todas las partes a «mantener la racionalidad y la moderación, no echar leña al fuego y no intensificar los conflictos».
Asimismo, ha pedido a Rusia y a Ucrania que se reúnan y reanuden el diálogo directo «tan pronto como sea posible», así como que promuevan gradualmente una desescalada y una «relajación» de la situación para llegar a un alto el fuego integral.
Tras ello, según esgrime el Ministerio de Exteriores chino en su comunicado, ambos países deben iniciar conversaciones de paz. «Deben alentarse y apoyarse todos los esfuerzos por resolver la crisis de manera pacífica. La comunidad internacional debe atenerse a la dirección correcta de persuadir la paz y promover conversaciones, ayudar a todas las partes en el conflicto a abrir la puerta a una solución política de la crisis lo antes posible», ha pedido China, que se ha mostrado dispuesta a desempeñar «un papel constructivo» en este sentido.
Por otra parte, Pekín ha alentado a oponerse al empleo estratégico y a las amenazas de uso de armas nucleares, previniendo la profileración nuclear y evitando una crisis nuclear. «Las armas nucleares no se pueden usar y la guerra nuclear no se puede librar (…) Nos oponemos al desarrollo y uso de armas biológicas y químicas por (parte de) cualquier país bajo cualquier circunstancia», ha afirmado China en el documento que recoge sus doce propuestas.
Asimismo, ha hecho un llamamiento a mantener la seguridad de las centrales nucleares en Ucrania, mientras se ha opuesto a los ataques armados contra este tipo de instalaciones. «Hacemos un llamado a todas las partes para que respeten las convenciones de seguridad nuclear y otras leyes internacionales, y eviten resueltamente los accidentes nucleares provocados por el hombre», ha afirmado, mientras ha pedido el apoyo al papel del Organismo Internacional de Energía Atómica en la promoción de la seguridad de las instalaciones nucleares.
Entre otras medidas, el Gobierno chino también ha manifestado la importancia de resolver la crisis humanitaria en Ucrania bajo el amparo de Naciones Unidas, proteger a los civiles y prisiones de guerra, así como garantizar la exportación de granos y asegurar la estabilidad de las cadenas industriales y de suministro.
Con todo, Pekín se ha mostrado dispuesta a brindar asistencia y desempeñar «un papel constructivo» en la resconstrucción de posguerra, reiterando su petición a la comunidad internacional para que se una a dicho esfuerzo.