El ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Abbas Araqchi, ha confirmado que los daños causados por Estados Unidos a sus instalaciones nucleares han sido «considerables y graves» y ha advertido de que ahora «muchas realidades han cambiado» y cuentan ahora con nuevas exigencias en una eventual negociación.
«Al dejar atrás una guerra, muchas realidades cambian, y las condiciones después de la guerra son fundamentalmente diferentes a las anteriores», ha explicado, insistiendo en que tras la «fuerte resistencia» del pueblo iraní estos doce días «no es posible volver a las condiciones anteriores».
Araqchi ha señalado que ahora hay «nuevas reivindicaciones», entre ellas indemnizaciones por los desperfectos que han sufrido sus instalaciones, según ha explicado en una entrevista para IRIB, la televisión estatal, en la que ha informado de que no hay planes para volver a sentarse a negociar con Washington.
«Hasta el momento no se ha llegado a ningún acuerdo para reanudar las negociaciones», ha dicho este jueves el ministro, acusando a Estados Unidos de «complicar aún más las cosas» con sus bombardeos del pasado fin de semana a las instalaciones de Isfanhán, Natanz y Fordo.
«Murieron personas, estalló la guerra y la tarea se ha vuelto más difícil. Con este error, Estados Unidos complicó aún más la cuestión nuclear iraní en lugar de resolverla», ha señalado el ministro de Exteriores.