Lejos de pretender el hundimiento de la Unión Europea, Putin anhela una relación con ella basada en la cooperación y el entendimiento.
En los últimos tiempos, el presidente ruso, Vladimir Putin, se ha tornado en el chivo expiatorio de cuantos males afligen al continente europeo; o, mejor, a las élites económicas y políticas europeas. Así, estas últimas lo acusan de inmiscuirse en los procesos electorales de los países europeos y de afanarse en desestabilizar la estructura política del Viejo Continente.
Sin embargo, la dura realidad es bien distinta. Lejos de pretender el hundimiento de la Unión Europea, Putin anhela una relación con ella basada en la cooperación y el entendimiento: ‘Estamos totalmente a trabajar junto a Europa’, ha señalado el presidente ruso tras una reunión con su homólogo austríaco, el ecologista Alexander Van der Bellen.
En este sentido, Putin se ha referido a la hoy extraviada cooperación entre Rusia y la Unión Europea y a la necesidad de recuperarla: ‘Recuperar el pleno formato de nuestra cooperación no es solo interés de Rusia, sino también de nuestros amigos europeos’, ha aseverado.
El presidente ruso tampoco ha desperdiciado la oportunidad de referirse a las sanciones que la Unión Europea, impelida por su gran socio norteamericano, ha impuesto a su país: ‘Las sanciones son perjudiciales para todos y en el interés de todos está que se levanten’, ha manifestado el controvertido mandatario oriental, quien, en cualquier caso, se ha ufanado de que su país haya conseguido superar económicamente el efecto pernicioso de las sanciones.
Kurz, proclive a una mejora de las relaciones con Rusia
El primer ministro austríaco, Sebastian Kurz, que desde su nombramiento ha adoptado medidas incómodas para la Unión Europea, se ha manifestado en la misma línea que Putin. En este sentido, se ha mostrado proclive a un acercamiento entre la UE y Rusia a través de un ‘diálogo reforzado’.
Asimismo, Kurz, que encabeza un Gobierno integrado también por miembros del soberanista FPÖ, ha expresado su anhelo de que las sanciones impuestas a Rusia acaben, tarde o temprano, levantándose: ‘Esperamos también que haya avances en el este de Ucrania para que, según los acuerdos de Minsk, se puedan ir levantando las sanciones. Creemos que es mejor una situación en la que ganemos todos que otra en la que perdamos todos’.
Por otro lado, el primer ministro austríaco se ha comprometido a trabajar para mejorar las relaciones entre la UE y Rusia, hogaño deterioradas por las sanciones y las suspicacias: ‘No solo nos vamos a esforzar para fortalecer nuestras tradicionalmente buenas relaciones bilaterales, sino que también trabajaremos para mejorar la relación entre la UE y Rusia’, ha manifestado.
Recordemos, en este sentido, que el viceprimer ministro austríaco, Heinz Christian Strache, exigió el pasado fin de semana la suspensión de las sanciones a Rusia; unas sanciones que motejó de ‘molestas’.
