«Ser es defenderse», RAMIRO DE MAEZTU
La Gaceta de la Iberosfera
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Fernando Sánchez Dragó (Madrid, 1936) es escritor. Ha sido en dos ocasiones Premio Nacional de Literatura. Ha ganado el Planeta, el Fernando Lara y el Ondas. Como periodista de prensa, radio y televisión ha hecho de todo en medio mundo. Ha sido profesor de Lengua, Literatura e Historia en trece universidades de Europa, Asia y África. Sigue en la brecha.
Fernando Sánchez Dragó (Madrid, 1936) es escritor. Ha sido en dos ocasiones Premio Nacional de Literatura. Ha ganado el Planeta, el Fernando Lara y el Ondas. Como periodista de prensa, radio y televisión ha hecho de todo en medio mundo. Ha sido profesor de Lengua, Literatura e Historia en trece universidades de Europa, Asia y África. Sigue en la brecha.

La increíble iberosfera menguante…

14 de junio de 2021

…o lo que va de ayer a hoy y de anteayer a ayer.

Doy por hecho que todos los lectores de La Gaceta recordarán la película a la que alude el título de esta columna.

Lo que voy a incluir en ella, casi como plato único, no es, stricto sensu, ni periodismo ni literatura. Es, más bien, una lista similar a la de los reyes godos, puesto a buscar un símil absurdo. Ni siquiera, para colmo, la he redactado yo. Le llegó hace un par de días por whatSapp ‒en mi antediluviano Nokia no funciona ese artilugio, que detesto y al que he rebautizado, adaptándolo a la fonética española, con el apodo de sapo‒ a un amigo y fue éste quien me reenvió su texto en un formato diferente. Aunque su lectura resulte tediosa y, a ratos, ininteligible, pues en ella se detallan topónimos que se tragó la historia o borró la geografía y que hoy nadie recuerda, la verdad es que impresiona comprobar cómo aquella Iberosfera en la que, según Felipe II, no se ponía el sol, su crepúsculo empezó cuando el astro rey aún estaba en su cénit

Dicen algunos que el mayor imperio, por su extensión, de la historia universal no fue el romano ni el británico, y eso es cierto, sino el generado por la Horda Dorada del impetuoso Gengis Khan, y eso ya no lo es, por más que el territorio controlado por sus súbditos abarcase cuanto media entre Mongolia, el centro de Europa y Egipto. Hubo un imperio aún mayor, que llegaba desde las islas del Pacífico hasta las costas americanas de ese mismo océano pasando por África, de refilón, y por buena parte de Europa. Y ese imperio fue el español, al que hoy, extinta ya del todo su larga etapa colonial, llamamos Iberosfera. Un pasado común, una misma religión y un solo idioma es el líquido amniótico y genesíaco que aglutina ‒cada cual con su bandera, su gobierno y su camino‒ a todos los países que la integran. Lo que fuese imperio es ahora o debería ser, mal que le pese a algunos, como la Commonwealth en lo relativo al británico, un espacio de cooperación, de entendimiento y de amistad.        

Impresiona, sea como fuere, el proceso de jibarización experimentado por aquel imperio colosal e hispanocéntrico. Aquí lo tienen…

Territorios perdidos por España desde 1587:

1587. Nagasaki (Japón).

1599. Protectorado sobre Camboya.

1623. San Cristóbal y Nieves.

1624. Barbados.

1632. Antigua y Barbuda.

1640. Portugal

1640. Macao (China). Malaca (Malasia).

1642. Norte de Taiwán.

1654. Santa Lucia.

1655. Jamaica.

1663. Territorios de Ternate y Tidore en Indonesia y una parte de la isla de Borneo.

1670. Bahamas.

1674. Granada (la del Caribe).

1700. Territorios de la casa de Habsburgo: Austria, Hungría y Bohemia (hoy República Checa, Austria, Hungría, Eslovaquia y Alemania).

1704. Gibraltar.

1711. Países Bajos y Flandes, actualmente Bélgica, Luxemburgo, Holanda y también algún territorio del norte de Francia, como Artois.

1714. Ducado de Milán

1734. Reino de Nápoles (todo lo que hoy se entiende en Italia por Mezzogiorno) junto a las islas de Sicilia, Cerdeña y Malta.

1783. Dominica.

1794. Oregón, Idaho, Montana, Washington y sur de Alaska, en Estados Unidos, y el Suroeste de Columbia Británica, en Canadá.

1791. Ciudad de Orán (Argelia).

1801. Estados de Luisiana, Arkansas, Oklahoma, Kansas, Nebraska, Dakota del Sur, Dakota del Norte, Wyoming, Montana, Idaho, Minnesota y Iowa.

1802. Trinidad y Tobago.

1811. Paraguay y las Islas Malvinas.

1819. Colombia y Ecuador.

1819. Estado de Florida y parte de los estados de Luisiana y Texas,

1821. Guatemala, El Salvador, Costa Rica, Nicaragua, Honduras, Panamá y Belice.

1828. Uruguay.

1836. México, que también incluía los estados de California, Nevada, Utah, Arizona, parte de Colorado, Kansas, Oklahoma, parte de Wyoming y parte de Nuevo México.

1844. Chile

1845. Venezuela.

1847. Bolivia.

1863. Argentina.

1865. República Dominicana.

1879. Perú.

1885. Islas Marshall, pertenecientes a las Carolinas Orientales.

1888. Isla de Pascua

1892. Islas Gilbert, pertenecientes a las Carolinas Orientales., Fueron abandonadas en 1885 y ocupadas 7 años más tarde por el Reino Unido.

1898. Cuba y Puerto Rico. Florida, Luisiana.

1898. Capitanía General de las Filipinas, que incluía Filipinas, Marianas, Guam, Carolinas y pretensiones sobre Sabah en Malasia.

1898. Varios asentamientos en la isla de Nueva Guinea (hoy dividida entre Malasia y Papúa Nueva Guinea).

1899. Palaos.

1938. Islas Salvajes, que pertenecían al conjunto de Canarias.

1958. Diversos territorios del norte de Marruecos: Tetuán, Arcila, Larache, Aulef, Alcazarquivir, Xauen, Bab Taza, Puerto Capaz, Ketama, Torres de Alcalá, Villa Alhucemas, Targuist, Axdir, Ajnoul, Nador y Zeluán.

1968. Guinea Ecuatorial. Formada por las islas de Fernando Poo, Annobón, Elobey y Corisco, además de la Guinea Continental Española.

1969. Ifni, territorio ahora de Marruecos.

1976. Sahara Occidental (Cabo Juby, Saguia, El Hamra, Río de Oro).

Y en puertas, ahora, por entreguismo y dejadez:

– CEUTA

– MELILLA

– ISLAS CANARIAS

-CATALUÑA

 Et alii… 

A lo mejor algún día nuestros hijos y nietos, nos lo recordarán.

Pero seamos optimistas: siempre nos quedará Madrid.  

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