Los obispos españoles han valorado como «valiosas» las recomendaciones propuestas por el Defensor del Pueblo en su informe sobre los abusos sexuales en el seno de la Iglesia. En una rueda de prensa, la Conferencia Episcopal ha adelantado que diseñarán un itinerario para aplicarlas, pero critican que la «extrapolación» de los datos de la encuesta —que apunta que sólo 0,6% habría sufrido abusos por parte de sacerdotes— «no corresponden a la verdad» y piden no poner el «foco» solo en la Iglesia.
Así lo han puesto de manifiesto este lunes los obispos durante una Asamblea Plenaria extraordinaria de la Conferencia Episcopal Española, presidida por el cardenal Juan José Omella, arzobispo de Barcelona, y en la que han estado presentes un total de 88 obispos: 31 obispos de manera presencial y 57 por videoconferencia. También han asistido el presidente de la CONFER, Jesús Díaz Sariego, el secretario general Jesús Miguel Zamora y la secretaria general adjunta, Silvia Rozas.
«Duelen los abusos cometidos en la Iglesia. Sorprende también la extrapolación que se hace de los datos obtenidos en una encuesta adjunta al informe. No corresponden a la verdad ni representan al conjunto de sacerdotes y religiosos que trabajan lealmente y con entrega de su vida al servicio del Reino», se puede leer en un comunicado difundido por la Conferencia Episcopal Española, al término de la reunión.
La CEE explica que los obispos «han realizado una primera aproximación» a la investigación sobre los abusos sexuales a menores en la Iglesia realizado por la comisión encabezada por el Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo, al que invitaron a asistir este lunes a la asamblea pero que declinó la invitación por motivos personales.
En especial, han valorado «el testimonio recogido de las víctimas, lo que permite situar a las víctimas en el centro» y han considerado «también valiosas las recomendaciones propuestas en este informe» aunque aseguran que, «en buena medida, son convergentes con otras propuestas trabajadas en la CEE desde ya hace algún tiempo».
En este sentido, la CEE ha decidido encargar al Servicio de Protección de Menores de la CEE «el itinerario de la aplicación de las recomendaciones del Defensor del Pueblo, en relación a los cauces de reparación, prevención y formación» que será ya implementado en la próxima Asamblea Plenaria de noviembre.
En todo caso, los obispos españoles apuestan por abordar también los abusos en otros ámbitos y no solo en la Iglesia porque, según dicen, «dejar de tener en cuenta la magnitud del problema y su dimensión mayoritariamente extraeclesial, supone no afrontar las causas del problema y perpetuarlo en el tiempo».
Asimismo, consideran que «poner el foco exclusivamente en la reparación de las víctimas de la Iglesia, discriminaría a la mayoría de las víctimas, a las que convertiría en víctimas de segunda».