La Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha exigido este miércoles la liberación del obispo de Matagalpa, Rolando Álvarez, quien se encuentra en una situación de «extrema vulnerabilidad» en Nicaragua tras ser condenado a 26 años de cárcel por traición a la patria.
La Corte IDH ha pedido en un comunicado al régimen de Nicaragua que garanticen «un trato digno» al prelado «mediante el acceso inmediato a servicios de salud, medicamentos y alimentación adecuada», así como el contacto con «familiares y abogados».
De la misma forma, ha afirmado en un comunicado que el Gobierno debe tomar «las medidas necesarias para proteger eficazmente su vida, salud e integridad personal». La Corte ha dado un plazo de nueve días a las autoridades para que informen sobre su estado de salud.
En los últimos meses la dictadura de Daniel Ortega ha privado de nacionalidad a disidentes, ha expulsado del país a embajadores y ha clausurado miles de ONG nacionales e internacionales, así como medios de comunicación y organizaciones religiosas.