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Este artículo se publicó en La Gaceta antes de convertirse en La Gaceta de la Iberosfera, no siendo entonces propiedad de Fundación Disenso.

I Escapada de Día entre Barricas: Tras los pasos del Minotauro por Castilla y León: Visita a Bodegas Yllera desde Madrid.

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Instantánea del interior del Hilo de Ariadna, Bodegas Yllera. Foto: Grupo Yllera.

Queridos lectores:

Volvemos nuevamente al tema vinos después de visitar la región del vino de Burdeos, el Perigord, y todo aquello. En esta nueva serie que iremos viendo aquí, de vez en cuando, entre ruta y ruta, veremos explicaciones y recomendaciones de visitas a bodegas, tan de moda ahora, siendo sin duda un plan completísimo, y a la vez tan asequible;

Esta vez vamos a ver la ruta de ida, la visita y la ruta de vuelta desde Madrid a Bodegas Yllera, en Rueda. Visitaremos las dos bodegas que tiene el Grupo Yllera en Rueda, comeremos allí y volveremos a casa aprovechando una preciosa ruta de vuelta, entre castillos y paisajes típicamente castellanos.

Como veréis, la visita completa que aquí proponemos consta de 4 partes:

-Visita guiada a la bodega de elaboración. Veremos todas las fases de la producción del vino dentro de un reducido grupo de personas, desde la elaboración de los mostos, al embotellamiento, pasando por la fase de barrica.

-Visita al Hilo de Ariadna, original adaptación en homenaje a la mitología griega, consistente en unas antiguas bodegas subterráneas mudéjares reformadas que relacionan, dentro de una historia todo el mundo del vino, los vinos Yllera y la leyenda del Minotauro, explicada y adaptada de una forma muy curiosa, interesante y divertida.

-Cata de vinos en las instalaciones del Hilo de Ariadna: Un blanco y un tinto, acompañado de embutidos y quesos locales.

-Fantástica comida en las bodegas subterráneas, con diversos menús disponibles, que enseguida desarrollaremos.

Salida desde Madrid. Visita a la bodega de elaboración de Yllera en Rueda.

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 La visita transcurrirá entre dos bodegas, la de elaboración y otra de carácter mitológico podemos decir. Foto: Grupo Yllera.

Salimos por la A-6 Norte dirección La Coruña (es de peaje en el tramo de los túneles de Guadarrama) y después de algo más de una hora y media salimos en la salida 172, incorporándonos en la vía de servicio de la autopista, para llegar después de hacer 2 kilómetros paralelos a la carretera, a las bodegas de elaboración.

Una vez llegamos, dejamos el coche/moto en el parking y hacemos el previo “check-in”, consistente en dar nuestros datos de reserva, para que nos asignen un grupo. La mayoría de personas que hacen este plan lo hacen a través de las cajas temáticas “Visita a Bodega” de las marcas Smartbox/Plan B/La Vida es Bella. Son muy competitivas en precio y ofrecen multitud de bodegas en casi todas las regiones y D.O. de España, además de descuentos adicionales o regalos promocionales. Sino, la visita, cata y comida se puede hacer a través de la propia bodega (enlaces más abajo).

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Imagen de una estancia del Hilo de Ariadna, Bodegas Yllera, Rueda. Foto: Grupo Yllera.

Después de recorrer las estancias de la bodega de elaboración, parándonos en cada sitio, en los pasillos de las barricas, en los silos de aluminio, en las máquinas embotelladoras, salimos y vamos en caravana, en coche, a la bodega-exposición El Hilo de Ariadna.

El Hilo de Ariadna. Bajo el suelo de Rueda. Entre héroes y botellas. Tras los pasos del Minotauro en Castilla y León.

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 Entrada al conjunto de cuevas mudéjares reformadas de El Hilo de Ariadna. Aún hay muchas estancias destruidas pendientes de reformar bajo el suelo de Rueda. Foto: Grupo Yllera.

Una vez aparcados en El Hilo de Ariadna, sito a 5 minutos de la bodega de elaboración, que está a las afueras del pueblo, entramos y tras una breve introducción histórica y otros datos referentes al lugar que nos concierne como detalles arquitectónicos, introducción a la idea del Hilo y demás, bajamos por unas minúsculas y empinadas escaleras de ladrillo los más de 20 metros de profundidad que nos separa la entrada principal del Hilo con la primera de las cuevas mudéjares. El recorrido consiste en un homenaje a la historia del vino, relacionada con la figura del Minotauro y los dioses griegos que tienen que ver con el vino, a través de unas salas divididas según los distintos vinos de la bodega, la historia de cada vino y el carácter del mismo. Esas historias caracteres de cada sala, de cada vino, se van hilando, poco a poco y nunca mejor dicho, con la leyenda del Minotauro.

Tras seguir el hilo durante algo más de 1 kilómetro, recorrer la Grecia antigua y conocer al Minotauro, salimos de las cuevas cargadas de arte, vino y mitología para conocer del todo algunos de los vinos que hemos estado viendo. Para un avance de lo que podréis ver, podéis hacer click AQUÍ-ENLACE para ver las salas del Hilo.

 

Tras la teoría, toca la práctica. Entre blancos y tintos, lechazos y guisos. Cata y comida en el Hilo de Ariadna.

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Tras la teoría, viene la mejor de las prácticas: La buena cata. Tomaremos dos vinos, un blanco y un tinto. Foto: M. De Cárcer E.- Archivo propio.

Una vez vistas las 10 salas, conocidos los personajes mitológicos y vista la retalía de vinos que reúne el Grupo Yllera, subimos a la superficie de nuevo, directamente a la sala de catas. Una vez distribuido todo el grupo por la sala, nos instalamos en una de sus barricas, con sus correspondientes platos de queso y chorizo. Debo decir que lo que diferencia esta cata de otras es que el producto de tapeo es bueno. Muy bueno. En casi todas las demás catas en bodega es queso semicurado industrial llenabuches (con perdón). El queso que te ponen para maridar el Verdejo fresquito está exquisito. Y el chorizo para maridar el tinto Bracamonte Crianza, que está francamente bueno, tiene pintón y sabe fenomenal. Punto fuerte. Además, el tapeo es generoso, cosa que se agradece, porque luego hay señoras mayores o bebedores muy ocasionales que resoplan antes de tiempo… Tras repasar un vino blanco y otro tinto, comentarios, ruegos y preguntas, compras si proceden (hay una exposición de todos los vinos en diversos formatos, packs, mix de producto, ofertas especiales y demás, más algún producto de Merchandising de las bodegas), se da por finalizada la visita.

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 Imagen del comedor subterráneo donde podremos pegarnos un homenaje digno de tan mítica visita. Foto: Grupo Yllera.

Una vez terminada pues la cata, se da por terminada la visita con el aplauso riguroso a la simpática guía que nos ha estado explicando todo. Para los que se queden a comer, se continúa con la “experiencia” como está ahora de moda llamar todo plan temático bien planteado; bajamos de nuevo a las estancias mudéjares reformadas y adaptadas al Mito griego desde el incendio que hubo en 1998 y entramos en las cuevas que albergan las salas-restaurante, decoradas entre temática vinícola, estilo castellano medieval y frescos sobre la Grecia antigua. Hay 3 menús propuestos, por precio y materia prima a degustar, con una muy buena relación calidad-precio, y platos típicos, y bastante calóricos, como no podía ser de otra manera en esta parte de España y en estas circunstancias, a destacar, el impresionante lechazo a la brasa, las patatas guisadas con costilla, regado por un tinto (Yllera Crianza o Bracamonte Roble) y un cava Burbujas Cantosán Brut a los postres (con chupitos de orujo de vino finales si mal no recuerdo). -¡Ojo conductores!- En resumen, todo un festival para el paladar y para nuestros malogrados estómagos ansiosos de comida de verdad tras comidas de sándwich en la oficina/universidad y cenas “express” de entresemana.

Una vez terminada la fase gastronómica, recomiendo echar un ojo a los típicos hornos de los que disponen dentro de estas cuevas para hacer el lechazo.

Salimos a superficie de nuevo y enfilamos el coche, ya para volver hacia casa.

Fin de la visita. Vuelta a Madrid. Entre castillos y granjas. Ruta de vuelta: Medina del Campo, Olmedo, Coca, Segovia y La Granja de San Ildefonso.

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Vista panorámica al Castillo de la Mota, Medina del Campo, visitable de vuelta de Rueda. Foto: Quinok para Commons.

Salimos Sur a Medina del Campo, a pocos kilómetros de Rueda, por la A-6. (Esta ruta por cierto va a carecer de peajes, puesto que volveremos por preciosas carreteras de interior y por el Puerto de Navacerrada). Os propongo diversos destinos de camino, pudiendo parar donde queráis, dadas las circunstancias temporales o meteorológicas en las que os encontréis. Obviamente, ver todo en una tarde de vino y lechazo es imposible, pero nos puede servir como referencias de ruta plausibles para futuras escapadas o visitas;

Podemos parar a ver el maravilloso castillo de Medina del Campo, antes de entrar en las carreteras de interior a Olmedo-Coca-La Granja, etc. Bien de interés cultural, el castillo de la Mota data del siglo XV, y se erige en una mota (terreno elevado) sobre la histórica villa vallisoletana de Medina del Campo. Vemos si os parece este célebre castillo, de los más famosos de Castilla y León, cuyo edificio más destacado es su torre del homenaje llena de impactos de artillería.

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El parque del Mudéjar es otra maravilla de la villa del Caballero de Lope de Vega. Imagen: J.L. Cernadas.

Entramos en la comarca Tierra de Pinares y pasamos por Olmedo, si queréis, villa histórica que da nombre a la célebre obra de Lope de Vega. Con multitud de casas-palacio señoriales, muralla y diversas iglesias dignas de ver, la Real Chancillería y la Torre del Reloj son también monumentos destacados de esta villa castellana. El parque temático mudéjar de Olmedo reúne miniaturas de arquitectura mudéjar de la región, como es el Castillo de Coca, otro alto en el camino propuesto.

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Panorámica del impresionante castillo de Coca, Segovia. Foto: Ignacio Cobos.

Hablando del castillo de Coca, seguimos el cauce del Eresma (que lo veremos hasta bien entrados en el Puerto de Navacerrada, a 1500 metros de altura ya) por una de las muchas carreterillas comarcales que surcan estas tierras de campo y pinos a ambos lados de la carretera. Recomiendo principalmente el impresionante y mundialmente referenciado castillo mudéjar de Coca. Podemos hacer el recorrido interior de sus murallas con vistas al pueblo y al campo castellano. Impresionante.

Una vez visto Coca, enfilamos ya hacia Segovia, capital de Provincia, que ni menciono dado que no se puede parar media
horita. Para ver Segovia como se merece necesitamos un fin de semana del que en esta Ruta de Día no disponemos. Aunque sí podemos combinar el fantástico destino de Segovia con la visita y experiencia vitivinícola de Yllera en Rueda.

Entramos en la Granja y bueno, como también tiene bastante cosa, propongo un chocolate caliente en cualquier tasca-cafetería auténtica cercana a la Plaza de España de esta muy noble y muy leal villa.

Salimos de La Granja de San Ildefonso Sur, entrando en los bosques del Valsaín, y haciendo la preciosa carretera del Puerto de Navacerrada, pasando por sitios preciosos como Boca de Asno-atención excursionistas- o la zona de la Bola del Mundo o Valdesquí (atención montañeros y esquiadores), que linda casi con Peñalara-Puerto de Cotos, Rascafría y todo aquello. Desde Navacerrada, ya en la Comunidad de Madrid, bajamos vía Becerril de la Sierra y Collado Mediano hasta Villalba, donde enlazaremos con nuestro último destino de este ajetreado día de vino, gastronomía e históricos monumentos, además de paisajes de meseta y montaña, campo castellano y bosque mediterráneo.

Consejo de El Viajero Incansable

A la hora de comprar algo en Bodegas Yllera, una sugerencia: su vino Frizzante de Verdejo 5.5. Está ideado para aquellos que no les gusta el vino, precisamente. Es una especie de lambrusco con uva de la tierra de Rueda. Con una inicial y arriesgada apuesta de primera tirada de 3 millones de botellas, ésta se agotó enseguida. Es una maravilla, para tomar muy frío. Disponible en blanco y en rosado.

Si os gusta comprar vino a granel, la avenida principal de Rueda es vuestro sitio. Se pueden comprar  cajas de vino de mesa de cooperativas varias o de marcas de la zona de 15 litros tiradas de precio. También embutidos, quesos y otros productos vernáculos.

Un evento que no os podéis perder de Olmedo a principios de otoño es la Galopada Nacional, una dura, frenética y arriesgada carrera de caballos, de poco menos de 5 minutos, y dos vueltas llenas de obstáculos, caídas, y adelantamientos de alto riesgo, lejos de la pomposidad y ludopatía del Hipódromo de moda de turno o la fastuosidad del Palio de Siena, Toscana. Es una carrera a lo bestia, en el campo, donde hace falta tener algo más que destreza y un buen jamelgo para competir en la misma.

 

Datos de interés de la visita a las Bodegas del Grupo Yllera

Direccion: Ctra. Madrid-Coruña Km. 173.5, Rueda (Valladolid)

Visitas-Horarios (Con cita previa) Lunes a Viernes de 10:30 a 13:30 y de 16:30 a 18:30, Fines de Semana y Festivos: 10:30 a 14:30.

Contacto: 983868097/616561195

Enlaces: http://www.elhilodeariadna.es/inicio/ http://www.grupoyllera.com/index.php

Queridos amigos:

Espero que, como suele pasar con cada nuevo formato que sacamos aquí, en vuestro blog de viajes de La Gaceta de Intereconomía, tenga éxito éste y sigamos, entre ruta y ruta, proponiéndoos este tipo de visitas, tan de moda, tan asequibles y tan gratificantes para cualquier visitante amante de buenos y completos planes de fin de semana, en familia, pareja o entre amigos.

Nos vemos pronto recorriendo los pueblos del Maestrazgo y zonas anejas,

¡Buen viaje, feliz semana y mejor puente! (Podéis consultar otros posts del blog si tenéis pensado salir estos días para tomar referencias o coger ideas).

Siempre vuestro,

¡A ser felices!

Luis Poch de Gaminde
El Viajero Incansable
[email protected]
@viajerolpochg                                                

 

 www.facebook.com/viajeroincansableintereconomia

 

 

 

 

 

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