«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
La Gaceta de la Iberosfera
Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Este artículo se publicó en La Gaceta antes de convertirse en La Gaceta de la Iberosfera, no siendo entonces propiedad de Fundación Disenso.

Pablexit

28 de junio de 2016

Pablo Iglesias se ha quedado sin su asalto al cielo, las caras de los líderes de Podemos solamente eran superadas por las fugas de apoderados podemitas que iban teniendo los colegios electorales a las 9,30 de la noche.

Podemos empezó el día fuerte, pero a medida que pasaban las horas, en muchos colegios electorales ocurría lo que hace años, concretamente lo que ocurrió en las elecciones del ´96, cuando muchos votantes guiñaban el ojo a los interventores del Partido Popular, que se empezaba a ver un silencio raro, pero las papeletas del PP bajaban más que las otras. Si las papeletas del PP bajan más, si sabemos que muchos de sus votantes traen el sobre de casa, y si además añadimos que el voto por correo estaba en aumento…lo que teníamos era un claro indicio de que el chavismo iba a ser rechazado por la mayoría de españoles, afortunadamente.

Ahora Pablo Iglesias ha sido el tercero, por detrás de Pedro Sánchez (que tendrá que hacérselo mirar la criatura). Y ahora será Rajoy quien nuevamente diga “¿quién quiere pacto?” y entonces la pelota estará en el tejado de C´s y de PSOE, porque si ellos piden la cabeza de Rajoy, éste les dirá que primero rueden las suyas.

La noticia es que España se libra del chavismo y tanto el CNI, como el Ministerio de Defensa, no van a estar en manos de antisistema que odian España. Las identidades de los infiltrados en ETA, o en otras operaciones, van a seguir a salvo. Los autónomos seguiremos siendo exprimidos, pero al menos no nos atacarán por el mero de hecho de querer prosperar. España ha elegido moderación y prudencia, dejando de lado posturas revolucionarias y peligrosas.

El ganador de la noche es Rajoy, está claro, pero quien ha metido el gol más bonito ha sido Alberto Garzón, porque a lo tonto les coló un acuerdo a Podemos donde les pedía “1 de cada 6 diputados” y claro, ahora el sorpaso se lo ha dado IU a Podemos. Sin duda le van a pedir un “Pablexit” porque claro, ahora que no ha asaltado el cielo, se arriesga a tener sin comer a las huestes. Ha creado una bestia que demanda ganar y eliminar al PP, y resulta que ha ocurrido lo contrario, por lo tanto esa bestia hambrienta le pedirá más acción.

La sonrisa de un País se ha transformado en el “pucherito de Errejón” porque las caras de Íñigo Errejón han sido tan sinceras que solamente me apetece seguir viendo esos miles de carteles con los que Unidos Podemos ha empapelado Madrid, para reirme mirando esas caras falsas en las que sonríen. Hoy he visto varios y no dejaba de saborear ese golpe que la ciudadanía española le ha dado al chavismo, la “gente” como algunos quieren llamar al pueblo, ha votado y todos los nuevos políticos decían que había que hacer caso al pueblo, pues hala…¡hagan juego señores!.

Os indico un detalle que define mucho a este nuevo concepto de política de titular, de líderes enchufados en programas de tv en horario de máxima audiencia y de jóvenes corriendo a votar sin saber lo que votan. Precisamente el detalle es que en los 18 años que llevo participando en procesos electorales, muy pocas veces (por no decir ninguna) los perdedores se han acercado a darme la mano y felicitarme por la victoria. Hoy no iba a ser menos y ningún podemita se ha acercado a darme la enhorabuena. Hoy he comprobado, una vez más, que la sonrisa de un País era una sonrisa falsa, de quita y pon, una sonrisa que iba a durar lo que tardasen en controlar a la Policía y las escuchas.

 

Termino recordando lo que decía Schopenhauer que “la causa de la risa no es sino la súbita percepción de la ignorancia entre un concepto y el objeto real”.

.
Fondo newsletter