Ecuador ha sido condenado a indemnizar con 412 millones de dólares (340 millones de euros) a la petrolera Perenco por una disputa de 2007 en la que la Administración de Rafael Correa aumentó del 50% al 99% su participación en los excedentes petroleros generados por las empresas.
Así lo ha determinado un fallo emitido por el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi) del Banco Mundial. Los excedentes petroleros son un tipo de ingreso extraordinario que las compañías privadas deben aportar al Estado. El cambio puesto por el Gobierno narcocomunista de Correa afectó en varios contratos participados por Perenco, por lo que la empresa decidió acudir al organismo del Banco Mundial en 2008.
La cifra definitiva a pagar por parte del Estado en favor de Perenco es de 374,37 millones de dólares (307 millones de euros) más intereses, una vez descontada la indemnización ambiental en favor del país. La reclamación inicial de Perenco ascendía a 1.420 millones de dólares (1.167 millones de euros).
Según el fallo recogido por la Secretaría de Comunicación de Ecuador, el Decreto emitido en 2007 «violó el Derecho Internacional Público en perjuicio de la petrolera Perenco». «El Estado ecuatoriano respetará y honrará sus compromisos internacionales, a pesar de cualquier discrepancia jurídica que haya sido expresada en el proceso», recoge el comunicado emitido por el Gobierno.