El tenista serbio Novak Djokovic ha sido detenido en Melbourne por la policía australiana tras la decisión del gobierno del país de cancelar nuevamente su visado por razones de «salud y de buen orden», lo que previsiblemente provocará que el número uno del mundo no pueda disputar el Abierto de Australia, primer ‘Grand Slam’ de la temporada.
Antes de la detención, el presidente serbio, Aleksandar Vucic, ha acusado a las autoridades de Australia de «maltratar y humillar» a Novak. «Vuelvo al asunto moral. Si querían prohibir a Novak el décimo trofeo en Melbourne, ¿por qué no le han rechazado de inmediato y le habéis dicho que no podía obtener el visado?», ha preguntado.
La detención de Djokovic se produjo minutos antes de la medianoche en España, según informa la CNN, en un lugar pactado por ambas partes y como resultado del procedimiento a la alegación de Djokovic al Tribunal Federal de Australia, que sentenciará -en las próximas horas- de forma definitiva sobre la presencia de ‘Nole’ en el país.
El país oceánico denegó la pasada semana entrada al tenista por «no cumplir los requisitos de acceso a nivel sanitario» pese a que éste había viajado con una exención médica ya que no está vacunado contra el coronavirus.
El de Belgrado, que ya estaba entrenando en Melbourne para jugar el primer ‘grande’, recurrió ante la justicia y esta ordenó el pasado lunes la devolución de su visado, aunque estaba a la espera de que el ministro de Inmigración del país, Alex Hawke, pudiese revertir la decisión.
‘Nole’ ya había sido emparejado en la primera ronda del Abierto de Australia con su compatriota Miomir Kecmanovic y su ausencia obligaría a modificar todo el cuadro masculino, en el que el ruso Daniil Medvedev pasaría a ser el cabeza de serie número uno.
