La vicepresidenta ilegítima de Venezuela, Delcy Rodríguez, dijo el jueves que el país tiene capacidad para producir la Abdala, una candidata a vacuna cubana contra el coronavirus.
Venezuela, que tiene 30 millones de habitantes, ha recibido unas 750.000 dosis, entre la rusa Sputnik V y la china Sinopharm, mientras las academias de medicinas, ciencia y gremios de salud reclaman que el régimen acelere el ingreso de vacunas ante un auge en los contagios y fallecimientos por covid-19.
«Hoy hemos visitado esta planta para verificar todas las condiciones, que están dadas para la producción de la vacuna contra el covid-19 Abdala en Venezuela», dijo Rodríguez a la televisión estatal.
En la planta, en el campus de la Universidad Central de Venezuela, la mayor del país, la funcionaria señaló que revisó junto al Ministerio de Salud de la dictadura «todo lo que es la participación de Venezuela en los ensayos de fase III de esta vacuna».
La autoridad reguladora cubana dio luz verde en marzo para iniciar el proceso final para Abdala, que lleva el nombre de un poema del héroe de la independencia de Cuba del siglo XIX, José Martí.
El estudio de la vacuna se completará en julio y los primeros resultados se publicarán en agosto, según medios de la tiranía castrista.
La vicepresidenta no dio detalles sobre el inicio o cantidad de personas involucradas en los ensayos de fase III de Abdala o cuántas dosis se podrían producir una vez aprobada.
El Ministerio de Información no respondió de inmediato una solicitud de comentarios.
Venezuela reportó el miércoles 1.115 casos positivos y 12 fallecimientos por el virus, para un total de 170.189 contagios y 1.705 muertes por COVID-19 desde marzo del 2020, cuando se detectó el primer contagio.
Sin embargo, tantos especialistas como las academias han dicho que los casos son más y que las autoridades hacen pocas pruebas, ocasionando un subregistro.