El Ayuntamiento de Palma, en manos del PSOE con el apoyo de Unidas Podemos y los nacionalistas de Més, ha anunciado el cambio de nombre de doce calles para «erradicar del callejero las reminiscencias del franquismo y del fascismo».
En el listado ha incluido la plaza al almirante Cosme Damián Churruca y Elorza y la del almirante Federico Carlos Gravina y Nápoli, dos héroes de la batalla de Trafalgar, contienda acontecida en 1805. Se da la circunstancia de que Churruca murió precisamente en la batalla y Gravina un año después (1806) por las heridas de contienda. Y Franco nació en 1892.
También se ha decretado la eliminación de una calle dedicada al almirante Pascual Cervera y Topete, que participó de forma muy destacada en batalla naval de Santiago de Cuba en 1898, la avenida en honor a Joan March, uno de los empresarios españoles más influyentes del siglo XX, la calle de Brunete, la calle de Toledo, entre otras.
El Consistorio izquierdista ha manifestado que cumple así con la Ley de Memoria Democrática de 2018″ y la «obligación moral» de eliminar estos símbolos de los espacios urbanos de Palma. Así, el grupo municipal de Unidas Podemos en la ciudad ha celebrado la sustitución de los nombre de las calles, «un hito histórico después de años de trabajo».
Canviam el nom de 12 carrers pel seu origen franquista en compliment de la Llei de Memòria i Reconeixement Democràtic del @goib. Estam convençuts que eliminar símbols feixistes de l'espai públic és avançar en democràcia.
— Jose Hila (@hila) March 22, 2021
No oblidam. A Palma, justícia i reparació! 💪✊ pic.twitter.com/jv2IhlnqSq
VOX: ‘Es ignorancia histórica’
VOX, por su parte, ha afirmado que la decisión del Ayuntamiento para imponer calles a anarquistas, sindicalistas y artistas catalanes es un nuevo ejemplo de «ignorancia histórica».
Así ha anunciado que cuando gobierne devolverá la nomenclatura original «al callejero mutilado» por la izquierda.
El coordinador de VOX, Sergio Rodríguez Garí, ha recordado que «ni Franco fundó Toledo, ni construyó el castillo medieval de Olite, ni combatió en Trafalgar con Churruca, por lo que carece de cualquier sentido erradicar sus nombres de las calles».
«Extirpar a personajes como Joan March o José de Oleza para imponer a anarquistas, sindicalistas y varios artistas de procedencia catalana demuestra una vez más que el proceso de sustitución cultural avanza en Palma de la mano de un PSOE entregado al nacionalismo más talibán y reaccionario», ha añadido.