«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
Con 109 votos a favor, 38 en contra y seis abstenciones

La Constituyente chilena, dominada por la izquierda, abre la puerta a la legalización del aborto sin límites

Convención Constitucional de Chile. Reuters

La Convención Constitucional de Chile, dominada por formaciones de izquierda, ha abierto este martes la puerta a la implementación del aborto libre en la eventual nueva Constitución que será sometida a plebiscito en los próximos meses en el país sudamericano.

Así, el órgano encargado de redactar la nueva Carta Magna chilena ha discutido el 15 de marzo lo referente a “derechos sexuales y reproductivos” de la población y, partiendo de la idea de que «todas las personas son titulares de derechos sexuales y derechos reproductivos. Estos comprenden, entre otros, el derecho a decidir de forma libre, autónoma e informada sobre el propio cuerpo, sobre el ejercicio de la sexualidad, la reproducción, el placer y la anticoncepción», dejó entrever la futura legalización del aborto sin límites en el país.

La polémica disposición, que ha sido aprobada por 109 votos a favor, 38 en contra y seis abstenciones, contempla en uno de sus incisos el deber del Estado de garantizar «sin discriminación, con enfoque de género, inclusión y pertinencia cultural, así como el acceso a la información, educación, salud, y a los servicios y prestaciones requeridos para ello, asegurando a todas las mujeres y personas con capacidad de gestar, las condiciones para un embarazo, una interrupción voluntaria del embarazo, parto y maternidad voluntarios y protegidos».

La votación ha sido celebrada por la recién designada Ministra de la Secretaría General del Gobierno de Gabriel Boric, la ultraizquierdista y líder del lobby feminista chileno Camila Vallejo, quien ha saludado a través de Twitter el “trabajo” de las “convencionales feministas”.

Por su parte, el excandidato presidencial del Partido Republicano, José Antonio Kast, ha lamentado el hecho, alertando que con la decisión aprobada por la Constituyente se allana el camino para que “en Chile se pueda asesinar impunemente hasta los 9 meses de embarazo”.

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