El Índice de Precios de Consumo (IPC) se situó en tasa interanual en el 6,1%, según los datos publicados este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), impulsado por el incremento de precios en los carburantes.
El IPC interanual encadena su decimocuarta tasa positiva consecutiva y suma dos meses seguidos en tasas superiores al 6%, niveles que no se veían desde hace casi tres décadas. En tasa mensual, el IPC rompió con una racha de cinco meses de ascensos al registrar en enero una disminución del 0,4% respecto a diciembre de 2021.
El precio de alimentos como el aceite de oliva ha subido un 30,1% en tasa interanual; las frutas frescas, un 8,8; la carne de vacuno, un 6%; las harinas y cereales, un 10,6%; el arroz, un 8%, la leche, el 6,6%; y los huevos y el pan, un 5,3%, etc. Mientras, los carburantes han subido más de un 20% en el último año: un 25,7% el diésel y un 23,1% la gasolina. Y la electricidad, un 46,4%.
La inflación subyacente -sin alimentos no elaborados ni productos energéticos- aumentó en enero tres décimas, hasta el 2,4%, con lo que se sitúa 3,7 puntos por debajo de la tasa del IPC general. Es la tasa más elevada de la subyacente desde octubre de 2012.
El INE ha destacado que con la implantación de la nueva base se incorporan novedades metodológicas que mejoran la precisión del indicador, así como cambios en la composición de la cesta de la compra y una nueva estructura de ponderaciones.
El cambio de base es un proceso que se realiza cada cinco años para renovar el IPC mediante su adaptación a los cambios en las pautas de consumo de los hogares y la incorporación de mejoras metodológicas.