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reconoce un aumento exponencial

Las contradicciones del Defensor del Pueblo ante la llegada de inmigrantes ilegales a Canarias

Inmigrantes ilegales esperan en Arguineguín (Gran Canaria). Europa Press

El pasado miércoles el Ministerio del Interior cerró su último informe. Según recoge este último balance, a día 15 de marzo han llegado a España un total de 4.678 inmigrantes ilegales. Pese a suponer una ligera bajada de apenas un 9% comparando estas cifras con los totales de 2020 para la misma fecha, los datos actuales siguen siendo aún lo suficientemente alarmantes como para detenernos a un análisis más pormenorizado.

Las cifras globales apuntan a un descenso únicamente motivado por una leve relajación en las llegadas a nivel peninsular y una disminución circunstancial de las entradas por tierra a través de Ceuta y Melilla. 

Si miramos hacia las entradas totales por vía marítima, las cifras nos indican que la presión migratoria sobre las costas españolas sigue en aumento. Pasamos de recibir un total de 4.033 inmigrantes ilegales a fecha 15 de marzo de 2020, a experimentar un incremento superior al 8%, lo que nos trae a costas españolas casi 4.400 inmigrantes (4.377), según datos del último informe.

En cuanto a embarcaciones, hay un ligero incremento de un 1,4% con respecto a datos del año pasado. El cierre de datos de este martes arroja que en lo que llevamos de año han accedido más de 220 embarcaciones (224). Cabe destacar que la mayor parte de estas llegadas por vía marítima se dividen entre Almería (80) y Canarias (70). Entre la provincia andaluza y el archipiélago se reparten el 68,18% de las llegadas.

Ahora centrémonos en el archipiélago canario. A las islas Canarias han llegado a fecha 15 de marzo un total de 2.580 inmigrantes ilegales, que frente a los 1.219 contabilizadas el año pasado para la misma fecha nos lleva a un incremento de entradas ilegales superior al 110%. Y que frente a las cifras del año 2019 nos sitúa en un aumento exponencial de llegadas por encima del 2000%. 

Si nos detenemos en las embarcaciones llegadas a Canarias, las estadísticas nos sitúan también en aumentos notables. El archipiélago pasa de registrar la llegada de 42 embarcaciones en 2020 a cuantificar la entrada de un total de 70 embarcaciones a fecha 15 de marzo, un incremento superior al 65%. Por encima del 400% si lo comparamos con la cantidad de embarcaciones contabilizadas en 2019 (13).

Estadísticas de llegadas a Canarias. Fuente: Ministerio del Interior.

La visión contradictoria del Defensor del Pueblo

Hace unas semanas, el Defensor del Pueblo hacia entrega de un informe detallado de la situación que se está viviendo en el archipiélago canario. Informe que algunos medios describían como demoledor, pero que resulta un tanto contradictorio si lo analizamos detenidamente teniendo en cuenta la objetividad que nos aportan los datos y el análisis frente a situaciones similares vividas en otros lugares de Europa.

Para empezar, Fernández Marugán abre informe con una cita de la escritora somalí Warsan Shire: “Nadie deja su hogar salvo un hogar que es la boca de un tiburón”. Una cita de Shire que nos devuelve a la famosa campaña iniciada hace unos años con la llegada del Aquarius y que frente a estadísticas propias de ACNUR queda comprometida. Según recogía la agencia de la ONU en agosto del año pasado en uno de sus informes más contundentes, más del 70% de los inmigrantes que tratan de llegar a Europa no necesitan protección internacional. Algo que también sostienen los datos relativos a nacionalidades llegadas a suelo español, donde un 62% de estas llegadas proceden directamente desde Argelia (43%) y Marruecos (19%). El relato del “hambre y la guerra” y el relato de “la boca de un tiburón” caen frente a los registros.

Países de origen de los inmigrantes llegados a España. Fuente ACNUR

Si bien el informe abre con la citada frase de Shire, más adelante es el propio Defensor del Pueblo es el que llega a reconocer literalmente que estamos ante un “incremento de personas de nacionalidad marroquí que han accedido irregularmente a costas atlánticas”. Es decir, el propio Fernández Marugán deja en evidencia la cita de Warsan Shire con la cual pretendía hacernos creer una vez más que toda la inmigración ilegal que llega a nuestro país huye de lugares en conflicto.

Pero la contradicción va más allá. Según cita textualmente el Defensor del Pueblo en su monográfico sobre Canarias: “Es muy ilustrativo el ejemplo de la provincia de Las Palmas. De las 19.852 personas que han recibido en 2020, un 60% eran de procedencia marroquí, seguidos a mucha distancia de 3.104 ciudadanos malienses”. Es el propio Defensor del Pueblo el que se va alejando de la apertura de su informe. Los datos terminan imponiéndose al relato.

Además, Fernández Marugán hace diversas alusiones al sistema de asilo, comparando erróneamente la situación actual con la situación que vivió el archipiélago canario en el año 2006, cuando más de 30.000 inmigrantes ilegales llegaron procedentes en su mayoría de países subsaharianos que sí estaban pasando por una situación compleja. En estos momentos y como el propio Defensor del Pueblo sostiene en su informe, la mayor parte de la inmigración ilegal llegada a Canarias procede directamente del Magreb.

Las alusiones al cambio climático no podían faltar y en el informe que nos ocupa se llega a citar que “la emigración de los países del Sahel tiene, entre otros, un componente climático evidente” y que por este motivo “el número de desplazados aumentará en los próximos años dependiendo de lo que se deje crecer el calentamiento global y lo que tarden los gobiernos en adoptar medidas urgentes”. Es decir, una vez más las sociedades civilizadas somos los que propiciamos estos desplazamientos. Y en gran parte tiene razón, porque la indolencia en materia migratoria de países como España y la incapacidad de estas sociedades para tomar partida en origen, son las que van camino de naturalizar la inmigración ilegal como forma habitual de llegar a Europa desde África. 

Para rematar lo citado con anterioridad, Fernández Marugán invita a considerar estas “migraciones climáticas” como motivo más que suficiente para que los desplazados sean “merecedores de la calificación de refugiados”. Es decir, en unos años puede que baste un aumento de las temperaturas para que te concedan asilo y protección internacional.

En lo que se refiere a la acogida, resulta preocupante ver que este informe llega a reconocer un aumento exponencial de llegadas, algo que hasta el momento todas las voces del Gobierno han tratado de negar. Incluso el propio Pedro Sánchez llegó a afirmar en una entrevista reciente que con su llegada a Moncloa las llegadas de inmigrantes ilegales habían disminuido en un 50%. En esta línea, el Defensor del Pueblo llega incluso a hablar de situaciones de hacinamiento dado el aumento de llegadas al archipiélago canario, haciendo alusiones directas a la conocida situación que se dio durante el pasado año en el muelle de Arguineguín. En este punto, Fernández Marugán habla de que pudieron constatar como 80 inmigrantes ilegales con test PCR positivos permanecían entre el resto de acogidos en la explanada cercana al puerto de la localidad. Para evitar estas situaciones, el Defensor del Pueblo abre la puerta a un aumento de subvenciones publicas para la acogida ordenada de esta inmigración ilegal. Situaciones vividas en Moria o Lampedusa nos hacen ver que convertir una isla en un campo de “refugiados” no es la alternativa más adecuada.

Más del 75% de los menas no se han hecho las pruebas de determinación de edad

Si bien el informe sitúa el total de menas tutelados por la administración canaria en 2.666, también llega a afirmar que “según indica la entidad de protección autonómica” un total de 2.030 presuntos menores se encuentran pendientes de la realización de pruebas para la determinación de la edad. Es decir, la administración publica en Canarias está en estos momentos tutelando a más de 2.000 inmigrantes ilegales aplicándoles el sistema de protección contemplado para menores extranjeros no acompañados sin tener la certeza de que son menores de edad.

En este sentido, Canarias tiene un gravísimo problema, pues ya la última Memoria de la Fiscalía General del Estado alertó en su informe del 2020 de el descontrol existente en la gestión de los menas tutelados en el archipiélago canario. Para ello llega a mencionar el caso concreto de la FDE de Las Palmas donde se llegó a observar que inmigrantes mayores de edad, que incluso estuvieron condenados a penas privadas de libertad y cuya pena fue sustituida por expulsión, regresaban a España en patera y manifestaban ser menores de edad. “Cada vez se observan más casos de mayores de edad que superan ampliamente los 20 años, internados en centros de menores”, dice la Memoria de la Fiscalía General del Estado de 2019.

Expedientes de determinación de la edad 2013-2019. Fuente: FGE

La FGE lleva años arrojando datos que alertan de que en muchos casos tras la ejecución de las diligencias para la determinación de edad estos presuntos menores de edad resultan no serlo. Tenemos ejemplos en la Memoria del año 2018, donde en Algeciras (63,1%); Almería (60,84%); Málaga (55,92); Granada (57,83%) y Murcia (57,65%) prevalecieron los decretos de mayoría de edad. También los encontramos en la Memoria de 2019 en la que prevalecieron los resultados de mayoría de edad en Málaga (69,45 %) y Granada (66.84%) y los resultados fueron muy equilibrados en Almería (un 50,08 % de los decretos dictados han sido de minoría de edad) y en Cádiz (52,67 %).

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