El Ministerio del Interior de España ha utilizado la cuenta oficial en Twitter para promocionar al candidato socialista a la presidencia de la Generalitat de Cataluña, Salvador Illa.
La cuenta oficial ha publicado un mensaje firmado por el ministro, Fernando Grande-Marlaska, de «reconocimiento» y «agradecimiento» a Illa por su «coraje y trabajo incansable» frente al covid-19, y ensalzando «su talante dialogante y sereno», «cualidades que le hacen idóneo para liderar el cambio que necesita Cataluña».
Y todo pese a marcharse de campaña electoral sin dar explicaciones, y con un balance de mentiras, falta de previsión, más de 85.000 muertos y la ruina de cientos de miles de pequeños empresarios y autónomos.
Aunque el mensaje ya está borrado, la utilización partidista y sin escrúpulos que el Ejecutivo hace de las instituciones no es nueva. Ahí están sus injerencias en la Fiscalía General del Estado, presidida por la anterior ministra de Justicia del PSOE Dolores Delgado; el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), presidido por el socialista José Félix Tezanos; y CORREOS, dirigido por Juan Manuel Serrano, amigo personal del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Cabe recordar que la Junta Electoral Central (JEC) ya decidió el pasado año multar con 500 euros a Sánchez por el uso electoral de los salones de La Moncloa para una entrevista en vísperas de los comicios del 10 de noviembre de 2019.
Tampoco en las redes sociales, donde el Ministerio de Defensa se vio obligado a borrar poco después de llegar Sánchez a La Moncloa un tuit que mostraba una fotografía de la ministra, Margarita Robles, regando sus plantas y enlazaba a una entrevista en la que se la describía como «una amante de la vida sana«.