«En defensa de Alfie Evans, la vida y el legítimo ejercicio de la patria potestad», reza el comunicado.
El destino de Alfie Evans, el bebé que sufre una enfermedad degenerativa incorregible, parecía escrito cuando los médicos lo desconectaron del soporte vital el pasado lunes. Sin embargo y para sorpresa de toda la comunidad médica, el pequeño continúa respirando por sus propios medios.
Las autoridades británicas han denegado en diversas ocasiones el traslado de Alfie a Italia, país que le concedió la nacionalidad para facilitar el viaje, donde El Vaticano ha dispuesto todo para que sea tratado en el hospital infantil Bambino Gesù.
Me llega esto, para quien esté interesado: hoy ante la Embajada británica en Madrid, Paseo de la Castellana 259 D (una de las torres junto al Hospital de La Paz), 13:00 h., habrá una concentración en apoyo de #AlfieEvans y sus padres. Yo no podré asistir por motivos laborales. pic.twitter.com/p5M2ONcqzy
— Elena Postigo (@PostigoElena) 27 de abril de 2018
Los padres del pequeño han denunciado el atropello de las autoridades británicas, que han mandado un importante dispositivo policial al hospital de Liverpool donde se encuentra ingresado, y la sociedad civil se ha movilizado para tratar de salvar su vida.
Tras los multitudinarios actos en la plaza de San Pedro del Vaticano y el Duomo de Milán, este viernes ha llegado el turno en Madrid. Enraizados se concentró este jueves para rezar por el pequeño y a asociación Cada Vida Importa ha convocado una concentración frente a la embajada británica (Paseo de la Castellana 259D) para reclamar al Reino Unido que permita que el pequeño Alfie sea trasladado a Italia.
Sin novedades
El padre del pequeño, Tom Evans afirmó este jueves que colaborará con los médicos británicos para ofrecer a su hijo la «dignidad y el confort que necesita».
«En el interés de Alfie, vamos a trabajar junto con el equipo que le trata en un plan que asegure a nuestro niño la dignidad y el confort que necesita», sentenció Evans.
El juez que denegó el traslado a Italia dejó la puerta abierta a que el bebé pase sus últimos días en casa, si bien un médico del hospital de Liverpool argumentó que para ello sus padres deberían mostrar un «notorio cambio de actitud».
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