El 17 de febrero comenzará, en una librería de la ciudad de Malmö, la bautizada como ‘Hora Drag Queen de las Historias’, una especie de cursillo que tendrá como objetivo animar a los infantes a experimentar con la ideología de género
El principal objetivo de los impulsores de la ideología de género es la infancia, esa etapa vital caracterizada por la inocencia y la curiosidad. De este modo, no debe desconcertarnos ya la influencia de los postulados de esa deletérea ideología en libros de texto, películas de dibujos animados, anuncios publicitarios…
Uno de los países en que la ideología de género goza de mayor omnipresencia es Suecia, que desde hace tiempo se presenta al mundo como el más conspicuo paladín de la corrección política y de la posmodernidad. Así, sus autoridades abanderan la causa multicultural, promueven el abortismo y predican una suerte de ilimitada y buenista tolerancia.
El 17 de febrero comenzará, en una librería de la ciudad sueca de Malmö, la bautizada como ‘Hora Drag Queen de las Historias’, una especie de cursillo que se prolongará varias semanas y en el que hombres disfrazados de mujeres leerán cuentos a los niños. Unos cuentos que, tal y como ha explicado la propia librería, tendrán como principal propósito animar a los infantes a experimentar con su género.
El responsable de comunicación de la librería, Johan Björkwall, se ha afanado en justificar la inclusión de este curso en el programa de la institución: ‘Como librería certificada LGTB, queremos trabajar activamente en estas cuestiones. Por eso, cuando nos propusieron lo de la Hora Drag Queen de las Historias, dijimos que sí’, ha aseverado, tratando de almibarar la dramática realidad que se esconde tras el adoctrinamiento.
‘Romper tabúes y estereotipos’
El curso será impartido por Stefan Anderson y su marido Mats, que narraron su primer cuento LGTB en la celebración del ‘Orgullo’ en Malmö el pasado año. Entonces, inspirados por un proyecto similar realizado en San Francisco, ambos trataron de acercar los dogmas homosexualistas a los más pequeños.
Con afán de explicar mejor su proyecto, Anderson ha concedido una entrevista a una cadena de televisión local; una entrevista en la que ha reflexionado sobre la importancia de que los niños conozcan la realidad de la homosexualidad y la transexualidad: ‘Por lo general, sólo se ve a las drag queens en televisión, clubes nocturnos y desfiles del Orgullo Gay. Por ello, nuestra actividad va a ser muy útil para los niños’.
En este sentido, la drag queen ha utilizado el ya manido y archiconocido argumentario del lobby LGTB sobre los estereotipos y las convenciones sociales: ‘A través de nuestros relatos, los niños aprenderán que es importante romper tabúes y normas sociales. Queremos mostrar que no es divertido carecer de limitaciones’.
En la sistémica soflama de Anderson también han estado muy presentes los términos ‘diferencia’ y ‘diversidad’: ‘Todos somos diferentes. Venimos de lugares diferentes, de distintas culturas, somos diferentes y nos comportamos de modo diferente a otras personas’, ha concluido.
No es éste un caso asilado de prácticas adoctrinadoras en Suecia. Ya mencionamos en La Gaceta la existencia de un libro de texto, dirigido a infantes, en el que se normaliza y promueve abiertamente la poligamia.
