El Instituto Juan de Mariana ha anunciado que, a cierre de 2023, España alcanzó un resultado de 15,2 puntos frente a un promedio de 9,5 puntos de los estados miembro de la Unión Europea. De esta manera, España «se convirtió en el país de la Unión Europea con mayores niveles de miseria económica, superando la media comunitaria en un 60%».
Este nuevo Índice de Miseria replica la metodología original del académico estadounidense Arthur Melvin Okun para definir los países que están en situación de «estanflación». El resultado es un indicador en el que se agregan la tasa de paro y el IPC, permitiendo un análisis comparado entre países y regiones, aunque el instituto español agrega la tasa de paro al Índice de Precios del Consumo.
En este sentido, y actualizando los datos a julio de 2024, «vemos que el promedio europeo asciende a 8,8 puntos, mientras que España alcanza los 14,4 puntos y se consolida otra vez como el país con peor desempeño». Esto se debe esencialmente a que «el paro tiene más incidencia que la inflación en el resultado obtenido», revelando la preocupación que genera «la contrarreforma laboral impulsada por Pedro Sánchez y Yolanda Díaz».
Por otro lado, a nivel autonómico, «la evidencia disponible para los años anteriores a la pandemia confirma que las comunidades autónomas con menos esfuerzo fiscal han tendido a exhibir mejores indicadores de paro e inflación». Así, el Instituto Juan de Mariana afirma que «no sorprende que España se sitúe en posiciones de cabeza en los indicadores puesto que somos el socio de la UE que más ha aumentado su presión fiscal en los cinco últimos años».
La contribución significativa del paro: «Complica la situación de millones de familias»
En España, el desempleo hace una contribución muy significativa al resultado en el Índice de Miseria, sugiriendo que, el problema de paro, sumando también la crisis de la inflación, «ha desencadenado una tormenta perfecta que complica enormemente la situación de millones de familias». Además, resalta que los niveles de paro doblan la media europea, provocando consecuencias sociales.
El ejemplo que utiliza el Instituto Juan de Mariana es que, si seguimos con la estructura de precios de 2023, para que una familia pueda igualar los niveles de consumo que tenía en 2018, tendría que gastar 2.275 euros más. Asimismo, en el caso del supermercado, el esfuerzo que requiere desde la llegada de Pedro Sánchez al Gobierno ha aumentado un 35%.
