Entiendo que los símbolos tengan su importancia, pero llevamos tanto con este asunto tan macabro que en el futuro no podrán dejar de verlo sino como una especie de locura colectiva.
‘Las exigencias de Podemos bloquean el Presupuesto’, abre El País. Sánchez depende, para mantenerse en la Moncloa un minuto más, de una coalición de partidos incompatibles. Cada uno tiene sus intereses y sus votantes, y debe complacer a todos.
Por otra parte, cada uno de ellos sabe que su actual poder e influencia dependen de la continuidad del socialista en el poder, con lo que tampoco van a dejarle caer por una nimiedad. El resultado de todo esto es la locura política en la que vivimos.
Pero no es tema recurrente en mis primeras. Se repiten más la exhumación de Franco, la muerte por disparo del yijadista de Cornellá y el éxodo de venezolanos.
Lo de Franco es patológico. Entiendo que los símbolos tengan su importancia, pero llevamos tanto con este asunto tan macabro que en el futuro no podrán dejar de verlo sino como una especie de locura colectiva. Uno recuerda a aquellas tribus primitivas de que hablan los antropólogos y sus rituales de magia simpática. España tiene problemas reales, ninguno de los cuales se va a solucionar con el traslado de un cadáver. Sí puede, en cambio, remover heridas y atizar viejas rencillas.
El País lo da discreto, como quinta noticia: ‘Ciudadanos no se opondrá a la exhumación de los restos de Franco’. Franco es radioactivo, y si Sánchez propusiera hacer vudú con su cadáver cualquier partido parlamentario vacilaría antes de oponerse.
El Mundo abre con la foto de un río de gente en una carretera, con sus magras pertenencias a cuestas. Son los venezolanos que huyen del infierno en el que el bolvarismo ha convertido Venezuela. No es algo realmente excepcional, porque sucede invariablemente allí donde se impone en serio el socialismo. ‘El nuevo bolívar de Maduro dispara la pobreza y el éxodo’.
Abriendo, ‘El PP no se opondrá a la exhumación de Franco, pero sí a otro decretazo’. Es curioso que El País y El Mundo hablen en sus primeras sobre la exhumación titulando por quién no se opone, y refiriéndose cada uno a un partido. Por algo será, imagino.
En ABC, la ocasión de la foto -y del tema único- es la misma, pero en un primer plano. ‘No es la guerra de Siria, es Venezuela’. Los efectos del socialismo y de la guerra suelen ser muy parecidos, aunque los primeros son más duraderos.
Foto del interior de la Basílica del Valle de los Caídos abriendo La Razón, que tira balones fuera en este asunto: ‘Los Franco podrán recurrir la exhumación para que los restos vuelvan al Valle’.