«Ser es defenderse», Ramiro de Maeztu
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ENTREVISTA A JOSÉ ANTONIO KAST
ENTREVISTA A JOSÉ ANTONIO KAST

‘La verdad es la mejor herramienta para enfrentarse a la izquierda’

23 de junio de 2022
«Le avisamos al entonces presidente Piñera que si no hacía bien su trabajo, su sucesor sería de la izquierda más radical e ideológica»

José Antonio Kast es el hombre que pudo ser presidente, y que ojalá lo hubiera sido, de Chile. De la nación que nos sirvió a los españoles de faro de la prosperidad y la libertad durante tantos años y que ya no lo es. Si acaso de boya junto a una escollera para que no nos estrellemos. La buena noticia es que, hoy, José Antonio Kast es el nuevo presidente de la la Political Network for Values, la Red Mundial Provida y sustituye en el cargo nada menos que a la presidente de Hungría, Katalin Novak. Enhorabuena.

Respuesta — Novak es una mujer muy destacada y noble y espero estar a la altura. Ella es una persona muy cercana que irradia alegría, conocimientos y rectitud. Espero poder potenciar todo lo que es la actividad de los liderazgos que se destacan por defender principios trascendentes como la vida, el matrimonio… todo lo que la izquierda ha combatido permanentemente.

—¿Qué puede hacer esta Red Mundial Provida que usted preside en este momento apasionante de la historia y ante la posibilidad de que el Supremo estadounidense le dé la vuelta a la sentencia sobre el aborto de Roe contra Wade?

—Hoy día, más que nunca, lo que valoro es la posibilidad de que líderes mundiales y legisladores puedan encontrarse. Es verdad que vemos una evolución en los Estados Unidos, pero pensamos en muchos países en donde el aborto ha avanzado porque no hemos tenido los legisladores con la fuerza y la coherencia para defender sus principios. Queremos que puedan sentirse acompañados. Si se sienten solos, se retraen. La idea es enseñarles que no están solos y mostrarles modelos a seguir. Tenemos que proporcionar herramientas a esos legisladores que no tienen tiempo de enfrentar todos los temas. Para todo eso está la Red Mundial que busca fortalecer los vínculos provida. 

«Nosotros siempre hemos señalado que el proyecto Republicano es a medio y largo plazo. Las elecciones son sólo una etapa de un proyecto mayor»

Los estadounidenses dicen un frase que me parece acertada: «Saber que atropellaste un clavo no arregla el neumático». Pero necesitamos su experiencia, porque por detrás vienen muchos otros automóviles por la misma carretera electoral. Dígame dónde pinchó usted la llanta. Es decir, ¿qué error cometió usted para no ser presidente de Chile y sí este desastre que padecemos que se llama Gabriel Boric?

El neumático lo pincharon los que iban delante de nosotros y no nos advirtieron. Hace cuatro años nosotros le avisamos al entonces presidente Piñera que si no hacía bien su trabajo, su sucesor sería de la izquierda más radical e ideológica. Me tocó competir con Piñera y en esa misma campaña le dijimos que lo más probable era que ganara. Entonces, lo apoyamos. Pero le advertimos de que no tropezara de nuevo con la misma piedra, porque esta vez sería más duro.

Aquel aviso parece que le sirvió de poco al presidente Piñera…

—Dentro de las posibilidades que tuvimos, hicimos todo lo que pudimos. El Gobierno anterior de centroderecha no fue bueno. Dejó de lado las urgencias sociales y se ocupó de las elites o de los temas mal llamados progresistas que no tienen nada de eso.

¿En qué le afectó al Partido Republicano esa negligencia del centroderecha chileno?

—Nos dejó una situación muy compleja. En la elección pasada pensamos que alcanzaríamos un 15 por ciento y cinco diputados y tuvimos un 44 por ciento. Logramos empatar el Senado y la Cámara de Diputados. Hicimos lo que estaba a nuestro alcance. Seguro que podríamos haber hecho más cosas, ser más intensos en redes sociales… pero la carga política y emocional del Gobierno de Piñera fue muy fuerte y fue lo más duro y difícil de sobrellevar.

—¿Fue una decepción no llegar a la Presidencia?

—Esto es un proceso. Uno no tiene la posibilidad de lograrlo todo en la primera o en la segunda oportunidad. Nosotros siempre hemos señalado que el proyecto republicano es a medio y largo plazo. Las elecciones son para nosotros una etapa de un proyecto mayor. No sabemos quién liderará el proyecto, pero no tratamos de focalizarnos en una sola persona. Hay muchos liderazgos y de ellos tienen que surgir los nuevos rostros para la política chilena.

«Jamás habíamos visto que el desencanto de los chilenos fuera tan alto después de tan poco tiempo de gobierno»

Lo bueno de los chilenos es que contestan por adelantado las preguntas que tenía preparadas… En este caso, sobre el liderazgo del Partido Republicano. Conocemos a varios diputados del Partido Republicano. Conocemos al jefe de la bancada, Cristóbal Urruticoechea, pero… la pregunta es directa: si usted ya no lo va a ser, porque usted se fue tras perder las elecciones, ¿dónde encontramos un nuevo líder en Chile?

—Nosotros actuamos con tiempo, con la inmediatez. A mí me tocó ser punta de lanza. Aquí con ustedes estuvieron Cristóbal Urruticoechea y Cristian Araya… y van a venir más (a Madrid) porque queremos generar ese vínculo. Hoy en día ellos ejercen liderazgos regionales importantes y queremos que se conviertan en liderazgos nacionales.

¿Y usted?

—Yo sigo muy activo en la reserva, en una segunda línea… con instrucción. No sabemos qué va a ocurrir en los próximos tres años. Esto va muy rápido y jamás habíamos visto que el desencanto de los chilenos fuera tan alto después de tan poco tiempo de gobierno. 

«Hay que recordar que fue la propia derecha [de Piñera] la que abrió las puertas a romper con la institucionalidad y atentar contra la democracia»

Boric, por cierto, contó con el apoyo de todo el castrochavismo, es decir, con el poderoso Foro de Sao Paulo, el Grupo de Puebla… la internacional de la miseria. El socialismo iberoamericano —y español, ya lo siento— trabajó de manera activa en su contra. ¿Quién le apoyó a usted? 

—Primero decir que el señor Iglesias y el señor Errejón fueron muy proclives a apoyar a este grupo frenteamplista. A nosotros nos apoyaron la ciudadanía y el sentido común. Hemos tenido buenos vínculos con personas, movimientos políticos y sociales en España, con sectores republicanos americanos, en Colombia… Pero las realidades de cada país son distintas. Cada uno tiene que construir su propia historia. Debemos tomar como ejemplo la izquierda, que es internacional y que tiene una agenda que repite como un modelo para cada país. Nosotros logramos sintonizar con el ciudadano que vio que se dejó de lado lo más básico, que es el sentido común.

¿Cuál fue su estrategia de comunicación?

—Llamando a las cosas por su nombres fuimos creando un espacio de comunicación, primero a nivel virtual, porque la izquierda es muy violenta y trae efectos a los que ejercemos la política de frente.

«Nosotros, se lo aseguro, somos absolutamente contrarios al apruebo en el referéndum del 4 de septiembre»

Esa violencia trajo más efectos…

—Ahora tenemos un proceso electoral en curso para decidir si Chile acepta, o no, una nueva Constitución. Algo que fue planteado por el anterior Gobierno de derechas… porque hay que recordar que fue la propia derecha la que le abrió las puertas a romper con la institucionalidad y atentar contra la democracia. Chile se salió del marco institucional fruto de la violencia extrema de la izquierda.

—Y ahora, el referéndum…

—Este 4 de septiembre tenemos un llamado a plebiscito para evaluar el trabajo que ha hecho una asamblea constituyente que fue fruto de la violencia y de la intransigencia de la izquierda. Nosotros, se lo aseguro, somos absolutamente contrarios.

—La Constituyente está tocando los pilares esenciales de lo que fue una larga etapa de prosperidad en Chile. Educación, pensiones, propiedad privada… y está haciendo del indigenismo el centro de su política de destrucción nacional. ¿Por qué es tan peligroso el indigenismo para la causa de la democracia en la Iberosfera?, y una pregunta añadida por si acaso se me adelanta: ¿queda vida inteligente en la izquierda chilena para remediar este desastre?

—La izquierda internacionalista ha buscado cómo tomar temas después de la caída del Muro de Berlín. Entonces hubo una esperanza en el mundo occidental. La izquierda se va reinventado o toma otras caretas, otras caras para vender la misma ideología. Y eso lo hacen a partir del Foro de Sao Paulo… Y cuando el Foro se extrema, crean el Grupo de Puebla para decir que son más moderados de lo que es el Foro dirigido por Lula y potenciado por Chávez y Maduro.

Insisto en la pregunta, ¿no queda vida inteligente en la izquierda?

—La izquierda inteligente, esa izquierda centrista, ha sido arrollada por la izquierda ideológica y ha caído fruto del temor y de la pérdida de espacios de poder. Al final a la izquierda la mueve el poder para dirigir y usufructuar los bienes que le puede dar el Estado. También se dieron cuenta de que venía una nueva generación, parecida a lo que pudo ser aquí Podemos, pero que espero que en Chile también sean sólo una moda. La izquierda más centrista debería recuperar ese espacio fruto del desastre al que nos está llevando la izquierda radical. Esa izquierda que tiene rostros nuevos, pero la misma ideología comunista.

Rostros nuevos, universitarios…

—Es que tenemos jóvenes ilustrados, bien formado en colegios pagados y universidades que compraron toda la ideología de la izquierda radical comunista. Ahora mismo podemos decir que el partido comunista es el que maneja las cuotas de poder dentro del Gobierno de Gabriel Boric, que se supone que es una izquierda renovada. Esa izquierda más de centro tiene una posición distinta. Esto del indigenismo, la plurinacionalidad, la falta de propiedad privada… nos va a llevar al desastre. El indigenismo es parte del Foro de Sao Paulo. Es algo que ha ido surgiendo en Ecuador, en Colombia y en Perú con mucha fuerza, pero representa a minorías muy radicales que han ido quedándose sin sustento en la medida en que van afectando a toda la sociedad. Nosotros respetamos la cultura indígena, pero este nuevo estilo de democracia en el que el voto indígena vale diez veces lo que un voto nacional… No queremos una imposición de una minoría sobre una mayoría.

—¿Qué piensa que hará la izquierda centrista frente al referéndum del 4 de septiembre?

—Esperamos que prime el sentido común y que esa izquierda que cayó en temas de corrupción muy importantes que la distanció de la ciudadanía y que fue arrollada por la ideología, recupere espacios y vuelva por el camino de hacer las cosas bien. La ciudadanía ve en este nuevo progresismo una figura prístina y pura que claramente no es. Ahora que están en el poder, han caído en todos los esquemas de la corrupción institucionalizada que acabará pasándoles la cuenta.

«El problema es que durante mucho tiempo guardamos silencio y no levantamos la voz. Con tiempo, todo esto cambiará»

Es usted un optimista patológico.

—Soy un optimista compulsivo. Creo que el futuro depende de nosotros. Si hacemos bien nuestro trabajo y hablamos con la verdad, que es la principal herramienta para enfrentar a una izquierda que se basa en la mentira permanente hasta convertirla en una seudoverdad. Tenemos que señalar, como aquel niño, que el Rey va desnudo y que destruye todo lo que es el progreso real, la cultura, la identidad nacional… Tenemos que apelar a ese sentimiento profundo de la sociedad chilena que quiere sus símbolos patrios, que entregó la vida por la defensa de la nación, que cree en el valor de la familia, que cree en que los padres son los primeros educadores, que cree que los padres trabajan para tener un bien y traspasárselo a sus hijos…

—Son tiempos curiosos en los que la izquierda se ha vuelto antisocial…

—Esta izquierda, por ejemplo, va en contra de las políticas de vivienda social que han imperado durante años en Chile. Esas políticas que consistían en entregan viviendas sociales más modestas pero en propiedad. Y a partir de  lo propio, yo construyo. Hoy día, la izquierda quiere prestar la vivienda. Esa es una política fracasada. Lo mismo en el tema de las pensiones. Nosotros avanzamos en un sistema de pensiones de carácter individual con el aval solidario del Estado para quien no tiene. La izquierda, por el contrario, dice que acabó lo personal y que todo va a ser solidario. Y lo solidario ha sido un fracaso a nivel mundial.

«Tenemos que lograr que las nuevas generaciones se interesen por la filosofía, la antropología, la sociología…  que están capturadas por la izquierda»

La construcción de un nuevo lenguaje para imponer una nueva realidad es una de las prácticas preferidas de la nueva izquierda, del feminismo de tercera ola y del lobby LGTBI. ¿Cuál es esa nueva realidad que nos quieren imponer y cómo la frenamos?

—La izquierda a través del lenguaje construye realidades. Pero ellos mismos en algún momento no son capaces de mantener el lenguaje. Hablan de los, las, les… Al final lo han llevado a tal extremo que han perdido el sentido común cuando hablan de los y las establecimientos, de los y las medicamentos. La gente se da cuenta y ven que se van extremando… De nuevo, hay que hablar con la verdad, desde el sentido común, hablar de que hay hombres y mujeres, no de personas menstruantes como dicen ellos. Todo va en contra del sentido común, contra la identidad del ser y eso es algo que debemos ir desvelando. El problema es que durante mucho tiempo guardamos silencio y no levantamos la voz. Con tiempo, todo esto cambiará y se reubicará. Requerimos la conquista de las ideas, de la educación, de la capacitación… Por eso es relevante lo que están haciendo ustedes en España a partir de medios de comunicación, de centros de estudios, publicaciones…

—La izquierda tiene todo eso…

—La izquierda publica mucho. Dice que tienen grandes pensadores, aunque no apuntan a la correcto. Nosotros tenemos que recuperar ese espacio. Tenemos que lograr que las nuevas generaciones se interesen por la filosofía, la antropología, la sociología…  que están capturadas por la izquierda. La izquierda cosecha lo que ha ido sembrando.

Entonces, quizá no descartamos una llamada para un renovado liderazgo. Don José Antonio Kast, muchas gracias en nombre de la Fundación Disenso y en nombre de La Gaceta de la Iberosfera. Puede contar con Foro Madrid para lo que necesite en la batalla a favor de la vida y en contra del socialismo.

—La idea de esta gira, donde me apoya también el director ejecutivo de nuestro centro de estudios, que es Ideas Republicanas, y el director ejecutivo de nuestro movimiento política y social, es poder aprender de la experiencia de otros países. Muchas gracias por la invitación para poder hablar tan abiertamente de muchos temas.

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