El pasado 8 de septiembre de 2021 Javier Mileicerró su candidatura a diputado por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina, en un escenario frente a 15.000 personas, y el día 12 -cuando se celebraron las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO)- terminó de posicionarse como la tercera fuerza en el país frente a los clásicos partidos de derecha e izquierda, con casi el 14% de los votos.
«Nos decían que no llegaríamos al 1,5%, que perderíamos contra los votos en blanco, que no superaríamos a la izquierda, que no conseguiríamos una diputación nacional, que era un milagro si llegábamos a las dos cifras, y terminamos con el 14% de los votos», cuenta Milei en esta entrevista grabada en Argentina para La Gaceta de la Iberosfera.
El candidato a diputado asegura que la mayor satisfacción fue saber que el «25% de los porteños se adhiere a las ideas de la libertad», en referencia al 13,6% que obtuvo como precandidato y al 11,3% que cosechó Ricardo López Murphy, exministro de Economía y que fue cuarto en la lista que presentó Juntos por el Cambio.
Milei defiende en que el liberalismo real solo está representado en su formación ‘Libertad Avanza‘, y denuncia que en la lista que lideró en las PASO María Eugenia Vidal -Juntos por el Cambio- hay «nueve socialistas y cinco candidatos que declaran haber votado al kirchnerismo». «Si coges un discurso de Chávez, le borras el nombre y se lo das a Vidal, ella te lo lee convencida», asegura Milei.
El economista explica que su éxito no es repentino, sino que es el fruto de «años en la batalla cultural» y denuncia la demonización que sufre desde instituciones y medios de comunicación: «Hay toda una metodología para investigar y demonizar a quienes están fuera del sistema», cuenta.
Sobre el resto de países de la región y el renacimiento del Socialismo del Siglo XXI, Milei destaca que es imprescindible ser consciente de la victoria del Foro de Sao Paulo, que está detrás de los regímenes totalitarios que existen en Iberoamérica. «Por eso firmé la Carta de Madrid y me alineé con la Fundación Disenso. Hay que tomar conciencia de que esta gente quiere impulsar el comunismo, el socialismo, que es la misma basura con distinto olor», incide.
Además de continuar en la batalla contra el comunismo, aclara que su objetivo es proponer una discusión desde el punto de vista moral. «Lo que no voy a hacer es ir contra la vida, contra el derecho a la propiedad, contra la libertad, no voy a subir un impuesto ni voy a crear uno nuevo. Con solo eso, el kirchnerismo de malos modales o de buenos -se refiere así al partido liderado por Mauricio Macri– o el socialismo, ya están del otro lado».
Milei defiende el liberalismo como la forma «más hermosa de vivir en las ideas de la libertad» porque el socialismo «es resentimiento» y se emociona al explicar que, en su opinión, los liberales viven en «una felicidad plena» porque son los responsables de su propia vida y no delegan esa responsabilidad en nadie. «Somos los artífices de nuestro destino y el Estado quiere cercenar nuestras libertades», acusa.
Así mismo, asegura que no negociará en el Congreso si finalmente es elegido diputado. «No voy a negociar, y cuando saquen proyectos fuertemente inmorales los voy a denunciar», afirma.
Sobre su ya mítica frase utilizada en campaña «no me metí acá para guiar corderos sino para despertar leones», Milei celebra que ese rugir «se escucha cada vez más fuerte», que cada vez son más las personas que creen que el Estado «no es la solución, sino el problema» y afirma que, a pesar de «todo el barro y la inmundicia» que existen en la vida política, se ha dado cuenta de que «vale la pena estar en la batalla por la libertad».