La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, lleva 1301 días –su nombramiento se publicó en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid (BOCM) el 17 de agosto de 2019– sin derogar la ley trans que ella misma permitió aprobar en la Asamblea autonómica en el año 2016. En la primera legislatura, con un Ejecutivo en coalición con Ciudadanos, nunca propuso la derogación de la norma. En la segunda, con un Ejecutivo en solitario –tras los comicios del 4 de mayo de 2021–, tampoco.
Ahora, a menos de tres meses de las elecciones autonómicas del 28 de mayo, ha avanzado, según recoge hoy El Mundo, que en la próxima legislatura presentará «un texto alternativo que sustituya» a la ley que se mantiene hoy en vigor para «plantar cara» a la ley trans nacional impulsada por el Gobierno de Pedro Sánchez y aprobada en el Congreso de los Diputados.
Desde que Ayuso fue investida como presidenta regional el 14 de agosto de 2019, la portavoz de VOX en la Asamblea de Madrid, Rocío Monasterio, que permitió con sus votos su llegada a la Puerta del Sol en virtud de un acuerdo que el PP luego incumplió en algunos de sus puntos, le exigió la derogación de esta ley, que permite la hormonación de niños de corta edad sin consentimiento paterno y con pena de retirar la custodia de los padres si se niegan, la participación de hombres trans en competiciones deportivas femeninas o el adoctrinamiento en los colegios en temas de «identidad de género».
La propia Ayuso se ausentó la pasada semana de la votación de la toma en consideración –a iniciativa de VOX– de la derogación de una norma que recoge que «en ningún caso» es requisito «acreditar la identidad de género manifestada mediante informe psicológico o médico» y que «la negativa de padres o tutores a autorizar tratamientos relacionados con la transexualidad (…) podrá ser recurrida ante la autoridad judicial y (…) se atenderá al criterio del interés superior del menor».
La toma en consideración salió adelante con los votos del PP, que incidió en el carácter «simbólico», pero que ha aparcado la cuestión hasta después de las elecciones. El grupo parlamentario del PP se excusa en que en los plenos que quedan antes de la disolución de la Asamblea «no da tiempo a derogarla», aunque con la mayoría que cuenta el PP en la Mesa del Parlamento regional sí sería posible.
El pasado mes de febrero, la Mesa de la Asamblea, que –reiteramos– controla el PP, censuró una pregunta del grupo parlamentario VOX sobre el número de niños hormonados en la Comunidad de Madrid por la ley trans. «Usted se niega a derogar una ley que es mucho más perniciosa que la ley de trans de Pedro Sánchez y que en su partido, con acierto, critican», manifestó Rocío Monasterio, antes de recordar que «en España hay más de 1.000 menores que han sido medicados con efectos dañinos e irreversibles para su salud».
