Los Mossos han activado en un plan para controlar el uso y la tenencia de armas blancas en Cataluña y reducir su presencia, sobre todo en entornos de ocio, lugares con afluencia de personas u otros espacios donde se detecte que hay un elevado número de incidentes.
Así lo explicó este miércoles en una rueda de prensa el consejero de Interior de la Generalitat, Joan Ignasi Elena, y la portavoz de los Mossos, Montserrat Escudé, en la que dijeron que el plan gira sobre la prevención, la detección y la investigación.
Así, explicaron que durante el año 2022 se registraron un total de 1.823 ataques con un arma blanca, un 44% más que en 2019. También detallaron que, durante el año pasado, se interpusieron 6.267 denuncias administrativas por tenencia de armas, un 80% más que en 2019.
«Hemos decidido actuar porque siempre que hay un repunte en cualquier tipo de delito tenemos que actuar», dijo el consejero.
Por su parte, Escudé aseveró que los delitos en los que se detectan arnas blancas son las amenazas, con un 22%; las lesiones, con un 22%; maltratos en el hogar, con un 13%, y los robos con violencia, con un 7%.
«También hay casos que han acabado con agresiones físicas graves o con homicidios por uso de arma blanca», añadió. Además, agregó que el 66% de los hechos relacionados con armas blancas se dieron en Barcelona –en la ciudad y en el área metropolitana–.