Desde Arran, una organización de jóvenes separatistas que integra la CUP, lo que piden es quemarlo.
La presidenta del grupo parlamentario de la CUP, Mireia Boya, ha abierto la puerta a «desobedecer» al Tribunal Constitucional (TC) para celebrar el referéndum ilegal el próximo 1 de octubre. También ha dicho que espera que «a nadie le tiemblen las piernas en los momentos decisivos que vendrán a partir de finales de agosto».
Se ha pronunciado así después de que este lunes el pleno del TC haya suspendido la reforma del reglamento del Parlament, con la que JxSí y la CUP pretenden tramitar de forma exprés la proposición de ley del referéndum, y apercibiera a los miembros de la Mesa de que desobedecer la decisión acarrearía responsabilidades, incluso penales.
En declaraciones a RAC 1, Boya ha explicado que hay «otras» fórmulas para poder aprobar la ley del referéndum, incluso la posibilidad de «desobedecer» al TC, y ha reconocido que la vía suspendida no era precisamente la que «gustaba más» a la CUP.
«Nos gusta mucho más el hecho de desobedecer», ha subrayado Boya, y ha añadido: «No reconocemos este derecho español que se aplica de una forma muy interesada y muy aleatoria».
Por su parte, desde Arran, una organización de jóvenes separatistas que integra la CUP, extendida por Cataluña, Valencia y Baleares, lo que han pedido es quemar el Tribunal Constitucional, según informó el pasado diciembre el digital Dolça Catalunya, que difundió el cartel.
“Contra la represión del Estado, quememos el TC. Avancemos hacia la ruptura”, dice el panfleto.
‘El tramo final del procés no será pacífico’
Cabe recordar también que esta formación, a la que los catalanes otorgaron 10 escaños en las elecciones de 2015, ha advertido de que el tramo final del proceso separatista no será «pacífico». Lo avisó el pasado enero la portavoz de la CUP Anna Gabriel en una entrevista publicada en Nació Digital.
La cupera ha destacado que «incluso en el caso de ganar un referéndum, se abre un proceso de confrontación democrática. Y es mejor que nos situemos en este escenario y no que la gente crea que su papel es de mera espectadora y que podrá asistir a un proceso que irá de forma pacífica, de ley a ley”.
«Que la gente se prepare que aquí habrá unas hostias que parirán terror», ha asegurado también Montse Venturós, alcaldesa de la localidad barcelonesa de Berga, que fue detenida tras humillar a la Justicia ‘españolista’.
«Lo que está pasando son los primeros embates que vamos a tener con el Estado español (…) Cuando se despierte el monstruo no estaremos hablando de si vamos a declarar o no. (…) Nosotros partimos de un concepto muy básico y clásico que es la lucha de clases«, ha manifestado esta individua.
