El Gobierno ha defendido la concesión de un crédito reembolsable de hasta cinco millones de euros a Marruecos para la construcción de dos plantas potabilizadoras esgrimiendo que con ello podría ayudar a «empresas españolas» a conseguir contratos en el reino alauí.
En una respuesta parlamentaria, el Ejecutivo ha respondido así al diputado del grupo mixto Pablo Cambronero, que había preguntado por los argumentos gubernamentales para justificar la concesión por el Consejo de Ministros de un crédito reembolsable desligado de hasta cinco millones de euros —y con cargo al Fondo para la Internacionalización de la Empresa (FIEM)— a la Oficina Nacional de Electricidad y Agua Potable (ONEE) marroquí para financiar dos plantas potabilizadoras en Zag y Moulay Brahim.
En su respuesta, el Gobierno de Pedro Sánchez afirma que Marruecos es «el principal mercado receptor de exportaciones españolas en África» y es «considerado como un país prioritario para las empresas españolas en las estrategias PASE (Países de Actuación Sectorial Estratégica) y Horizonte África».
Así, incide en que España se ha convertido en una «referencia mundial» en el sector del agua, «especialmente en desalinización y potabilización», y señala que dado que hasta 2050 Marruecos tiene previsto instalar otras veinte estaciones de desalinización de agua de mar «mantener una colaboración con la ONEE, órgano licitador responsable, podría resultar esencial de cara a que las empresas españolas».