El Informe del Estado de la Energía publicado por la Comisión Europea ha dejado en evidencia que España, junto a Portugal, son los dos países europeos con mayores dificultades para mantener sus hogares calientes durante el invierno de 2023. En concreto, un 20,8% de los habitantes de España y Portugal no pudo calentar su vivienda a una temperatura adecuada, lo que supone el mayor porcentaje de hogares afectados por la pobreza energética en la Unión Europea.
A nivel comunitario, el 10,6% de la población de la UE declaró tener dificultades para mantener su hogar adecuadamente caliente en 2023, un 1,3% más que en el invierno anterior. Así, el informe atribuye este incremento al contexto de crisis energética e inflación derivado de la guerra de Ucrania o las tensiones geopolíticas en Oriente Próximo.
Sin embargo, Bruselas confía en que la nueva legislación sobre el mercado energético «protegerá mejor de la desconexión a los hogares vulnerables y a los afectados por la pobreza energética» ya que, en caso de crisis de los precios del gas natural, las medidas de emergencia a nivel de la UE pueden establecer un escudo para los consumidores mediante intervenciones sobre los precios máximos al por menor. Asimismo, recuerda que los Estados miembros también deben actuar para garantizar el acceso.