Por no retirar la «estelada» de la fachada municipal en dos elecciones.
La alcaldesa de Berga (Barcelona), Montse Venturós (CUP), que afronta seis meses de inhabilitación por no retirar la «estelada» de la fachada municipal en dos elecciones, ha dicho que su juicio es «político» y ha alegado que la «legitimidad popular» está por encima de la legalidad.
En el juzgado de lo penal número 2 de Manresa (Barcelona) ha quedado visto para sentencia el juicio a Venturós, para quien la Fiscalía ha pedido seis meses de inhabilitación y una multa de 540 euros por un delito de desobediencia, al desoír la orden de la Junta Electoral para retirar la bandera independentista de la fachada del Ayuntamiento en las elecciones catalanas del 27-S y generales del 20-D de 2015.
En el juicio, la alcaldesa, que en noviembre de 2016 llegó a ser detenida por los Mossos d’Esquadra al plantar en dos ocasiones al juez de instrucción que la investigaba por desobediencia, ha respondido hoy tanto a la juez como al fiscal, ante los que ha alegado que «la legitimidad popular está por encima de la legalidad establecida».
A preguntas de los periodistas al finalizar el juicio, Venturós ha destacado que ha seguido una «estrategia de deslegitimación del Tribunal», pues considera que este procedimiento «ya tiene culpable de entrada» y que se trata de «un juicio estrictamente político».
El abogado de Venturós, el exdiputado de la CUP Benet Salellas, ha afirmado que «este proceso es un instrumento político al servicio de una ideología concreta», y ha aseverado: «Ni la Justicia está actuando por este trozo de tela (en referencia a la «estelada»), ni nosotros hemos venido a defendernos por eso».
La acusada ha reiterado su intención de mantenerse en el cargo aún en el caso de que finalmente resulte inhabilitada, pues ha manifestado: «Entendemos que partimos de un principio, que es el de la legitimidad popular, (que está) por encima de una legalidad establecida que pasa por encima y desposee de forma sobrada al pueblo».
Venturós ya adelantó que sí se presentaría esta vez en los juzgados, a diferencia de lo que hizo durante la fase de instrucción.
El juzgado de instrucción número 1 de Berga acordó el archivo de la causa pero un recurso presentado por el ministerio fiscal llevó a la Audiencia de Barcelona a reabrir el caso, por lo que finalmente hoy ha sido juzgada.
El diputado de la CUP en el Parlament Vidal Aragonès, que ha acudido a Manresa a apoyar a la alcaldesa de la formación anticapitalista, ha indicado que el de hoy ha sido «un nuevo capítulo de lo que es la represión contra el pueblo de Cataluña».
«Defendemos aquello que nuestro pueblo trasladó como un mandato de representación democrática», ha añadido al recordar que la «estelada» cuelga de la fachada del consistorio de Berga por un acuerdo del pleno municipal, que cuenta con quince concejales independentistas de los diecisiete que hay en total.