La Asociación de Fiscales (AF) ha plantado al fiscal general, Álvaro García Ortiz, en los trabajos para renovar su estatuto. Anuncia su «voluntad de no continuar en la mesa de trabajo para elaborar un nuevo Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal (EOMF)», y una Ley de Enjuiciamiento Criminal (LeCrim). Ésta reforma pretende dejar en manos de los fiscales las causas penales. La asociación considera que las «inaceptables insinuaciones» del fiscal general, Álvaro García Ortiz, ponen «en duda» la «profesionalidad» de las asociaciones.
La asociación mayoritaria de la carrera fiscal se ha pronunciado así en un comunicado emitido este lunes. Están molestos con el fiscal general tras decir que en las asociaciones judiciales y fiscales, «hay objetivos idénticos que los que tienen determinados partidos políticos».
La comisión ejecutiva de la AF ha asegurado que dichas declaraciones han «roto el marco idóneo y necesario para continuar los trabajos asociativos conjuntos para la elaboración de un nuevo Estatuto». Así las cosas, han criticado a García Ortiz por acusar a las asociaciones de «estar politizadas», algo que, a su juicio, no respeta el trabajo que realizan.
Fue el pasado 10 de abril cuando García Ortiz y las tres asociaciones fiscales se reunieron por primera vez para empezar a estudiar una reforma del Estatuto Fiscal ante una eventual reforma de la LeCrim. La reunión versó en su mayoría en estudiar sobre cómo se puede generar una comisión de estudio para modificar el Estatuto.
Con todo, las fuentes consultas señalaron que desde la AF insistieron en la necesidad de blindar la independencia de la institución. Pedían un un sistema transparente de adjudicación de asuntos y con transparencia en la comunicación del Gobierno. La reunión tuvo lugar después de que el Ministerio de Justicia anunciara el proyecto de una nueva LeCrim.