Se enfrentan a una petición de la Fiscalía de dos años de prisión por delito de enaltecimiento del terrorismo.
Seis jóvenes integrantes del colectivo Straight Edge Madrid (SXE MAD), detenidos en 2015, «promovían la lucha violenta en las calles» desde posiciones de tipo anarquista, según han declarado en el juicio los policías que se encargaron de la investigación.
La Audiencia Nacional ha iniciado este martes el juicio de estas personas, cinco varones y una mujer de entre 22 y 28 años, que se enfrentan a una petición de la Fiscalía de dos años de prisión por delito de enaltecimiento del terrorismo por difundir en redes sociales «la lucha activa y esencialmente violenta contra el orden constitucional».
Los acusados han negado estas acusaciones y han asegurado que sólo forman parte de un movimiento cultural y solidario que se dedica a organizar conciertos para recabar dinero con el que ayudar a refugiados sirios y causas como las de organizaciones de defensa de los animales.
Según explica en su escrito de acusación la fiscal, el colectivo Straight Edge (traducido al español como Camino Recto) constituye un movimiento surgido en los años 70 a partir de la cultura «hardcore punk» en Estados Unidos, que aboga por el autocontrol como único modo de ser libres.
Añade que esta filosofía de vida que en un primer momento se basó únicamente en el rechazo a drogas, tabaco y alcohol y amplió posteriormente sus reticencias respecto a la promiscuidad sexual, practicando asimismo el veganismo alimentario.
La fiscal destaca que apelando inicialmente a ese ideario en abril de 2013 se creó Straight Edge Madrid (con las siglas SXE MAD), que se define como un colectivo libre de drogas, de carácter libertario por la autoliberación, la liberación animal y de la tierra.
El considerado por la Policía líder del colectivo, el peruano domiciliado en Madrid Juan Manuel B.V., ha negado que incitara actos violentos a través de la página de Facebook y el perfil de Twitter de SXE MAD.
Ha explicado que forman un colectivo cultural dedicado a organizar conciertos y charlas y a divulgar contenidos musicales, que aboga por el «inconformismo» y que está contra las drogas y a favor de la defensa de los animales.
Ha asegurado que el movimiento Straight Edge «no es de una ideología homogénea anarquista pues en sus integrantes hay también republicanos y socialdemócratas» y ha recordado que incluso tiene representantes en el Parlamento sueco.
Juan Manuel B.V. ha reconocido que es el autor del vídeo publicado en 2014 en Youtube titulado «Bajo la capucha: Yo tapo mi cara, tú tapas la realidad» que obtuvo una gran difusión, con más de 25.000 visitas.
Según explica la fiscal está dedicado a Carlo Giuliani, un joven activista italiano simpatizante del movimiento antiglobalización que falleció como consecuencia de un disparo de un carabinieri durante los disturbios ocurridos en la Contracumbre del 98 en Génova en 2001.
En el mismo, Juan Manuel B.V. y otros dos acusados realizan comentarios como «un método de lucha nunca es pacifista», «nosotros no ejercemos la violencia al defendernos de la Policía» o «el Estado que nos oprime».
Juan Manuel B.V. ha asegurado que realizó ese vídeo como un trabajo para los estudios de Audiovisuales que estaba terminando.
La inspectora y el subinspector que se encargaron de las investigaciones han testificado que las mismas se iniciaron el 30 de enero de 2015 a raíz del incendio provocado en una sucursal de La Caixa de la calle de Cebreros de Madrid en cuya fachada fueron encontradas las siglas de SXE MAD que en ese momento desconocían.
Tras varias pesquisas comprobaron que un mes y medio antes habían quemado otra oficina de Bankia cercana.
De los contenidos que publicaban en las redes sociales les llamó la atención que animaban a atacar a los bancos, al capital y al Estado y a causar todo tipo de destrozos, decían que había que acabar con la paz social y llamaban a la lucha violenta.
La inspectora ha explicado que la actividad del grupo tuvo lugar «en una época complicada con bastantes manifestaciones y disturbios en los que hubo heridos sobre todo del lado de la Policía».