Imputado por un presunto delito de odio y resistencia grave durante los registros de la Guardia Civil a diferentes consejerías de la Generalitat.
El concejal de Cultura de Sant Joan de Vilatorrada, Jordi Pesarrodona, imputado por un presunto delito de odio y resistencia grave durante los registros de la Guardia Civil a diferentes consejerías de la Generalitat el 20 de septiembre de 2017 -permaneció durante unas tres horas al lado de los agentes que custodiaban la puerta del Departamento de Gobernación con su nariz de payaso- ha asegurado que se «sentirá fuerte y valiente mientras la gente esté movilizada», antes de su declaración el 23 de abril en el juzgado de instrucción número 2 de Manresa.
«No tengo nada de miedo», ha dicho, durante la protesta alrededor de la cárcel Modelo, donde el Comité de la Defensa de la República de la Izquierda (CDR) del Ensanche ha organizado una caminata de 24 horas por los golpistas presos y aquellos que sufren «la represión por parte del Estado español».
Pessarrodona, que la semana pasada apoyó la campaña ‘Demà pots ser tu-Mañana puedes ser tú’ para llamar a la unidad y remover conciencias ante la actual «persecución de la disidencia» que ven en el Estado, «con vulneración de derechos fundamentales como la libertad de expresión», ha manifestado que no se siente un «héroe» y que «no es nada agradable imputaciones y posibles condenas».
Cabe señalar que está imputado además por un presunto delito de desobediencia el pasado 1 de octubre, durante la celebración del referéndum ilegal, en el colegio Joncadella de su municipio.
