Un ecuatoriano admitió en mayo ante el tribunal de la Audiencia Provincial de Murcia que violó a una menor de edad en un coche y no entrará en prisión. La pena quedó suspendida con la condición de que no cometa ningún delito (en un lustro) y asista a un curso de «educación sexual».
La agresión tuvo lugar en abril de 2022 en la zona de ocio de Atalayas de la capital murciana. Él, que ahora tiene 30 años, y un amigo conocieron a una joven de 17 años y a sus amigas, con las cuales estuvieron bailando y bebiendo, según recoge La Opinión de Murcia.
Sobre las tres y media de la madrugada, la víctima y el agresor salieron de la sala y fueron hacia el vehículo en el que él llegó. Allí la agredió sexualmente. Actuó, según la sentencia del tribunal, «en contra de la voluntad de la joven, que se encontraba en estado de embriaguez por el alcohol que había consumido». La violó, la dejó en el coche… y él volvió a la discoteca.
El agresor fue detenido y llegó a estar más de un mes en prisión provisional. Cuando salió su juicio, su defensa llegó a un acuerdo con el Ministerio Público.